Mon Reirís, responsable de protocolo en el Concello de Vilagarcía: «Siempre tengo anillos para novios olvidadizos»

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

Pionero en las artes y oficios del ceremonial, confiesa haber sido siempre una persona de orden

22 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Nacer en Santiago fue una anécdota, porque Mon, el mayor de siete hermanos, llegó a Vilagarcía siendo solo un bebé. Su padre, Moncho, era ciego y regentaba un quiosco en el entorno de Vista Alegre, que siguió funcionando hasta hace ocho años. «Aunque nos dio de comer a todos, era muy esclavo», recuerda. La prensa se combinaba con los pitillos para hacer caja.

Formado en contabilidad, tuvo su primer trabajo con el concejal Carlos Pérez. Vivió un tiempo en Venezuela y fue comercial de La Menorquina, de una firma de salmón noruego y de pulpo de Senegal, que él mismo compraba en la lonja de Agadir.

En el momento en el que José Ramón Reirís (Santiago, 1957) comenzó a indagar en el mundo del protocolo, sobraban dedos en una mano para contar las instituciones que en la provincia de Pontevedra contaban con un responsable en la materia. «El Concello de Vigo sí, y también la Diputación, que siempre nos ayudó mucho en temas de organización, y creo que también el de Pontevedra. Desde luego, en O Salnés, ni un solo ayuntamiento tenía este servicio», recuerda Mon, que es como todo el mundo lo conoce en Vilagarcía.

El caso es que, tras una vida laboral bastante movida, con zarpazos en América y África, Reirís recayó en la Administración local de la mano de su amigo de siempre, el histórico alcalde socialista de la ciudad, Javier Gago. «Cuando fue elegido en 1991, con solo seis concejales, quiso que fuese con él como secretario de la alcaldía. Yo le pedí el verano para pensarlo, y al final accedí». Poco a poco, desde el manejo de la agenda del regidor, su labor fue internándose en cuestiones de ceremonial y organización, hasta que, ya en el 2005, se crea la plaza de responsable de Protocolo, que Mon gana después de haberse formado en las universidades CEU San Pablo de Madrid y Santiago de Compostela, además de participar en varias jornadas impulsadas por la Xunta.

«Mi vocación frustrada fue la de militar. Porque siempre me gustó el orden, la organización y que las cosas funcionen. Y el protocolo es fundamentalmente eso, organización», explica un hombre que hoy, precisamente hoy, día de Santa Rita, una de las festividades centrales del calendario de Vilagarcía, se jubila. Aunque al lego pueda parecerle sencillo, el juego de las prioridades a la hora de sentarse a firmar un protocolo o simplemente de asistir a una misa, no digamos ya la colocación de símbolos oficiales como las banderas, puede dar lugar a muchos quebraderos de cabeza. Mon Reirís subraya la ocasión en la que Vilagarcía nombró hijo predilecto de la localidad al almirante Rapallo Comendador. A aquel pleno acudió, entre los invitados, Xerardo Fernández Albor, cuñado del homenajeado. Durante cuatro días, Mon estudió el acto junto al teniente de navío Leste, analizando la precedencia de autoridades y convidados. «Cuando ya estaba todo claro, alguien quiso dar un lugar que no le correspondía a Albor, como expresidente de la Xunta, pero yo me mantuve firme, porque su presencia no tenía nada que ver con el cargo —si fuese así, lo lógico habría sido invitar a quien entonces presidía la Xunta— sino con su relación familiar». Aunque la cosa no fue a mayores, un periódico de Santiago publicó un artículo afirmando que no se había respetado la figura del expresidente. «Tuve que telefonear y ponerme serio, porque es necesario seguir una norma y marcar un criterio, y todo el mundo debe respetarlo».

Uno de sus cometidos es organizar las bodas civiles que se ofician en la Casa Consistorial. Ayer, Mon intervino en su último enlace. Y también esto tiene su truco: «Todavía recuerdo al primer novio que había olvidado los anillos. Si vive cerca, puedes esperar, pero si no... Desde entonces, siempre tengo dos anillos para novios olvidadizos», confiesa con un guiño.

MONICA IRAGO

Siempre Santa Rita

Mon Reirís se jubila hoy, día de Santa Rita y de gran fiesta en Vilagarcía, que cada año él ayuda a organizar. Ya desde jovenzuelo, el entorno de Vista Alegre fue uno de los enclaves que el responsable de protocolo frecuentó con asiduidad.