La noche fue larga en la playa de Vilagarcía. El grupo municipal de Emerxencias tuvo que desplegarse tras detectarse la presencia en el agua de una mancha de gasoil de gran tamaño. Procedía el combustible del narcosubmarino que durante la jornada había sido reflotado en aguas de la ría y trasladado al muelle de O Xufre. Para evitar que esa sustancia acabase provocando un daño colateral serio, poniendo en jaque el marisco que pueda quedar en la playa, el servicio municipal se puso en marcha enseguida y desplegó en el arenal barreras y material absorbente para evitar problemas. Al mismo tiempo, distintos medios se afanaron para disolver de forma mecánica la amenaza.
El conglomerado de actuaciones parece haber dado resultado: esta mañana, un helicóptero ha sobrevolado la zona y ha comprobado que el mar está limpio, según informó el alcalde Alberto Varela. El mismo indicó que el único rastro que quedaba de la mancha eran algunas irisaciones que, según los expertos, acabarán desapareciendo por la simple acción de la luz del sol.
Desde la cofradía, el patrón mayor hacía esta mañana una nueva llamada a la calma. Las condiciones de la marea han provocado que el fuel que se haya podido depositar en la arena se encuentre en al zona alta de la misma, lejos de las áreas de producción marisquera. En todo caso, Villanueva señala que habrá que esperar unos días antes de saber a ciencia cierta si ha habido afectación o no.