«Non podemos expoñernos a unha multa de 20.000 euros»: así muere un grupo de WhatsApp que avisaba de radares y controles de tráfico en Galicia

Serxio González Souto
SERXIO GONZÁLEZ VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

Sus administradores advierten de que los cambios legales que traerá este año amenazan a cualquiera que pertenezca a uno de estos foros, y aseguran que hay ya una veintena de personas que han recibido citaciones judiciales

04 feb 2025 . Actualizado a las 17:46 h.

La drástica reducción de las tasas de alcoholemia concentró el foco de atención de la opinión pública a finales del año pasado, cuando la Dirección General de Tráfico anunció su intención de modificar la ley que regula la conducción de vehículos a lo largo del 2025. Los cambios, sin embargo, van mucho más allá de la tolerancia cero con la bebida al volante. Pertenecer a un grupo de WhatsApp o de cualquier otra red social que se dedique a alertar de la presencia de controles y radares de velocidad, una figura que ha proliferado como las setas en otoño, puede acarrear durísimas multas. Así lo advierten los administradores de uno de estos foros, muy popular en las Rías Baixas, que han decidieron clausurarlo. Su último mensaje es bastante ilustrativo: «As sancións económicas son cuantiosas, sendo para os administradores de grupos de seis mil a vinte mil euros. Con moita pena despois de tantos anos ao servizo de tod@s vós, debedes comprender que non podemos expoñernos a unha sanción do calibre que agora é».

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Los promotores de este grupo aseguran tener constancia de que, en estos momentos, «hai polo menos vinte persoas citadas en diferentes xulgados para ser sancionadas por administrar ou pertencer a grupos de tráfico». Que conste, reconocen, que han tratado de aguantar hasta el último momento, cambiando de nombre, retirando carteles y logotipos, y estableciendo un límite de 24 horas para que sus mensajes se autoeliminasen: «Pero estas medidas quédanse curtas ao ter eles a lei a favor», bajo el argumento de que «enviar avisos de controis atenta contra a seguridade cidadá, dando vía libre a persoas en estado de embriaguez ou drogados, e a delincuentes en xeral, que poden obviar os controis grazas a estes grupos».

Aunque los administradores subrayan que los agentes podrán acceder a los WhatsApp «sen orde xudicial, de forma legal», también asumen que, desde hace tiempo, «nos grupos hai inflitrados a punta pala, xa que en moitos non fixeron control de quen entraban». En resumidas cuentas, no ven otra opción que cerrar el foro y despedirse: «Moitas grazas a todos por todo este tempo, crecimos ata onde se puido, pero o grupo chega hoxe ao seu fin porque non hai elección». Su número de miembros superaba el millar.