La reforma de Luis A. Mestre aguarda por un convenio entre el Concello de O Grove y la Xunta

Leticia Castro O GROVE / LA VOZ

AROUSA

LETICIA CASTRO

El BNG advierte de la urgencia en actuar y critica la pasividad de ambos

14 jun 2025 . Actualizado a las 19:18 h.

El último hundimiento ocurrido en la calle Luis Antonio Mestre, de O Grove, pone de relieve la necesidad urgente de intervenir sobre la calzada. El incidente, provocado por un problema en la red de alcantarillado, de competencia municipal, no es nuevo, ya que la red de saneamiento es demasiado antigua y su renovación apremia. De hecho tras solventar el problema y comenzar a tapar, ayer viernes rompía el tramo contiguo de tubería.

La carretera, de titularidad autonómica, soporta una alta densidad de tráfico, incluyendo vehículos pesados, y se encuentra en condiciones pésimas desde hace décadas. De hecho, las grietas que presenta el pavimento, preocupan cada vez más a los vecinos y a los propios conductores, porque su estado constituye ya un problema real de seguridad. La cuestión compete por tanto a las dos Administraciones, y según explicaba ayer el alcalde, el socialista José Cacabelos, se ha planteado ya un convenio al Gobierno autonómico «e existe vontade das dúas partes de chegar a acordo», aunque el asunto va parece ir para largo.

La Xunta habría trasladado al Concello una memoria valorada de lo que se podría hacer, y ahora son los servicios técnicos municipales los que están revisando el anteproyecto, que ya avanza el regidor que se antoja algo escaso. En estos momentos, el gobierno local está redactando una propuesta de proyecto para reformar toda la calle, «a humanización de toda a rúa», dice.

Así que aún quedan muchos pasos por dar, acabar la redacción y volver a sentarse con la Consellería de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, que ayer mismo se pronunciaba únicamente para señalar que el hundimiento «é unha rotura dunha condución municipal». Se trata, por lo demás, de una obra importante «que pode superar os dous millóns de euros», explica Cacabelos, que ya ha solicitado a la Xunta que, mientras tanto, reponga el firme: «Aínda que sexa por tramos, porque na altura de Borreiros está nun estado lamentable», cuenta, pero de momento nada se sabe al respecto.

La cuestión ha hecho saltar las alarmas también en el BNG meco, que ya anuncia una iniciativa en el Parlamento gallego «ante a pasividade de Cacabelos á hora de negociar un convenio co Goberno autonómico», subraya su portavoz, Anselmo Noia. El nacionalista critica no solo al gobierno local, sino también al PPdeG por la visita «hipócrita» del pasado sábado «para denunciar o abandono da vila, cando as súas tarefas están desatendidas». Para Noia, la carretera está en una situación de emergencia, demanda su reforma integral, y pide a ambas Administraciones que se dejen del «pimpampún partidista» y se pongan a trabajar ya.