La nueva propuesta que se cuela en la Festa do Marisco, la xiba con fideo negro
AROUSA
El plato gusta entre los comensales y sobrepasa las 1.200 raciones vendidas
09 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Entre las más de veinte propuestas gastronómicas que ofrece el recinto de la Festa do Marisco, se cuela este año, un sabroso plato de xiba con fideo neghro, que parece estar conquistando paladares.
El producto, que únicamente tuvo presencia en las carpas de degustación en el año 2017, llega para quedarse los próximos años de la mano de Jose Carballa y los hermanos Dávila, como otra de esas elaboraciones contundentes en cantidad y en sabor, como el arroz de mariscos o los fideos mariñeiros, que no pueden faltar en cualquier mesa que se precie.
Pariente cercano de pulpos y calamares, llega para hacerse un hueco entre el cefalópodo rey y las navajas, acompañado de un toque sabroso de alioli que redondea la receta. La propuesta es curiosa y se cocina a fuego lento sobre los fogones con un sofrito en el que no faltan la cebolla, el pimiento verde, ajo, sal y aceite, junto a un toque picante apenas imperceptible, secreto de la casa, que le aporta el punto diferenciador junto a la tinta la gran protagonista, que es más que un mecanismo de defensa del propio animal, un ingrediente culinario de altísimo valor, con un sabor marino muy intenso. La elaboración conquista al primer vistazo, y el producto, con materia prima procedente en exclusiva de la lonja de O Grove es garantía de calidad.
Cuenta Xabi Dávila que la idea de haberse lanzado al concurso para cocinar el plato no es nueva, y por curioso que pueda parecer, a estos tres amigos se les ocurrió hace treinta años. En aquel momento llegaron con la idea al ayuntamiento de hacer una fideuá, «creo recordar que de almejas», pero por lo que sea la propuesta no cuajó y este año decidieron volver a rescatarla.
El choco o sepia, esa especie que se mueve en los fondos arenosos a escasa profundidad, escondido durante el día, era un producto que cada uno de los socios que están al frente del stand cocinaba ya, cada uno a su manera.
Fue la receta de Jose Dávila la que les dio el impulso. Era simple y muy sabrosa. Hicieron cálculos de todo el cefalópodo que necesitaban y se tiraron a la piscina.
Parece que no les ha salido mal, el feedback que reciben es muy positivo, hay comensales que repiten y llevan vendidas más de 1.200 raciones en lo que va de fiesta.