«Me interesa más la emoción que la perfección técnica»

La Voz

CAMBADOS

Isi Vaamonde, segundo por la izquierda, junto a The New School
Isi Vaamonde, segundo por la izquierda, junto a The New School

El músico cambadés presenta mañana su nueva banda en el auditorio da Xuventude, con notables convidados

01 may 2016 . Actualizado a las 05:10 h.

Podría haber bajado la guardia, acomodar su desahogo y recrearse en la nostalgia. Vivió Isi Vaamonde en los primeros años del siglo su época dorada en la escena musical madrileña, en la que alcanzó cierta notoriedad. Pero no. Desde su retorno a su Cambados natal no ha dejado quebrantar su ilusión ni aliviar su pasión. Su aspiración era crear una nueva banda. Y ahí está. Con cuatro tipos (David Falcón, Rubén Iglesias, Bruno Barreiro y Jesús Caramés) que no alcanzan los 30 años pero bregados en unas cuantas batallas. El estreno, mañana, retando al fútbol. Y es que el rock and roll nunca fue territorio para cobardes. E Isi bien que lo sabe.

-¿Cómo se siente tocando con gente a la que supera en un par de décadas?

-Es una lucha intergeneracional. Aportan la frescura y la energía de su edad. De hecho mis temas antiguos han sido revisitados y ahora tienen un sonido completamente distinto. Pero, por otra parte, vamos a decirlo elegantemente, las dinámicas de grupo son más difíciles de llevar (sonríe).

-¿Hay muchas diferencias entre el sonido de su etapa madrileña y el actual?

-Creo que hemos ganado potencia pero siguen estando presentes algunos elementos característicos míos como los slides en las guitarras o ese cierto toque folk que antes era más americano y ahora quizá es un poco más inglés, al estilo de The Watterboys o Inmaculate Fools. Puede que sea un sonido más actualizado, menos clásico.

-En los últimos meses ha mantenido mucho contacto con Kevin Weatherill, voz y guitarra de Inmaculate Fools, afincado ahora en Cambados. ¿Hasta qué punto le está influyendo?

-A nivel personal es un lujo tener la posibilidad de conocer personalmente a quien ha sido una de tus mayores referencias y descubrir que es una persona encantadora, que te abre su casa, coge la guitarra y te explica cómo le salen los temas, o te habla con una naturalidad que abruma de un desayuno con Roy Orbison o de un backstage con Van Morrison. Con él estoy aprendiendo muchísimo.

-¿Cuál es ahora el objetivo de Isi Vaamonde, seguir tocando, grabar...?

-Todo, todo. Hemos grabado tres temas y el resultado me gusta porque recoge muy bien el sonido del directo de la banda. Siempre me ha interesado más la emoción que buscar la perfección técnica.

-¿Echa de menos su etapa madrileña?

-Se echa de menos el estar metido en un circuito tan potente como el de la capital, pero cada etapa tiene un por qué. Para mí montar esto aquí desde la nada y conseguir que suene como suena también ha sido un reto. Añorar aquellos tiempos en los que tocaba en salas cojonudas tres veces al mes no tiene sentido porque Madrid tampoco es hoy lo que era. No es el Madrid que yo conocí. Creo que lo importante es encontrar un público y en Galicia hay gente muy melómana, con mucha cultura musical, a la que le puede encajar nuestro sonido, cargado de referencias míticas como The Cure, The Smiths o Bob Dylan.

-¿Hasta qué punto siente la responsabilidad de ser un veterano en la escena arousana?

-La responsabilidad que siento es la de mantener el nivel. Y eso te lleva a estar muy seguro antes de dar un paso en falso. No te aventuras con tanta facilidad. Pero con este grupo desde el primer ensayo ya me di cuenta de que iba a funcionar.