El Concello de Catoira quiere eliminar en dos meses la deuda con sus proveedores

La Voz CATOIRA / LA VOZ

CATOIRA

MARTINA MISER

Ha iniciado los trámites para acogerse, de forma voluntaria, al Fondo de Financiación de Entidades Locales del Ministerio de Hacienda

20 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Catoira ha iniciado los trámites para acogerse, de forma voluntaria, al Fondo de Financiación de Entidades Locales del Ministerio de Hacienda. El objetivo es liquidar en un plazo de dos meses la totalidad de las facturas pendientes con sus proveedores. La medida busca transformar esa deuda comercial en una deuda bancaria con condiciones más favorables para el municipio.

Según ha informado el alcalde, Xoán Castaño, la administración local prevé que el Ministerio autorice la operación gracias a las medidas de ahorro aplicadas desde 2023, que incluyen incrementos en impuestos y tasas municipales, así como una reorganización del personal. Entre las decisiones adoptadas figuran el aumento del IBI, el IVTM y otros tributos locales, el cobro de precios públicos por servicios como el «Madruga» o el programa de «Envellecemento Activo», y la supresión de puestos externos para llevar la contabilidad o gestionar la aula CEMIT, funciones que ahora se cubren con personal municipal.

El Concello estima que las facturas atrasadas podrán abonarse ya en julio si el Ministerio da luz verde a la operación y una vez que las empresas una vez que acepten el pago mediante el préstamo. A cambio, la administración local deberá cumplir con varias condiciones: garantizar los plazos legales de pago en el futuro, respetar la estabilidad presupuestaria y mejorar progresivamente el ahorro municipal y el remanente de tesorería. La medida forma parte de un mecanismo creado por el Ministerio de Hacienda para ayudar a los ayuntamientos a saldar sus obligaciones con proveedores. Existen dos regímenes: uno obligatorio para municipios con alta morosidad, y otro voluntario para aquellos que, como Catoira, presentan retrasos pero mantienen una situación financiera más estable. «Catoira acumula facturas atrasadas sen pagar que non ten sentido seguir arrastrando», señaló el alcalde. «Cambiar a débeda suporá tamén unha vantaxe clara para o Concello», asegura Xoán Castaño.