Eduardo Camiña, de Meaño, y Tomás Ucha, de Cangas, fueron el primer y segundo clasificados
19 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El centro de formación Carlos Oroza de Pontevedra acogió ayer la final del concurso que todos los años organiza la Asociación de Sumilleres de Galicia. Catorce profesionales de toda la comunidad compitieron por erigirse como los mejores y obtener así una de las plazas que da derecho a la gran final. El primer clasificado fue Eduardo Camiña, un joven de Meaño que ya fue consiguió en su día el premio Magnum al mejor sumiller que entrega el Instituto Galego do Viño. El segundo clasificado fue Tomás Ucha, un joven de Cangas. Ambos tienen en común que llevan tres años trabajando en el restaurante Mugaritz, que dirige el chef Andoni Luis Aduriz.
No lo tuvieron sencillo estos dos jóvenes para hacerse con el triunfo en el certamen. La primera prueba fue teórica y en ella tuvieron que responder a treinta preguntas relacionadas con el mundo del vino. Posteriormente, les pusieron delante cinco copas negras llenas de vino, cuyo contenido tuvieron que identificar sin más pistas que sus sentidos. La tercera prueba consistió en una cata de tres productos. Posteriormente, tuvieron que detectar los errores que había en una carta y ofrecer diferentes vinos para maridar un menú. También, hacer una decantación. De juzgar su labor se encargó un exigente jurado.
De entre los catorce profesionales que se presentaron al concurso, Camiña realizó el mejor papel y quedó clasificado en primer lugar. Este reconocimiento se viene a sumar a la ya extensa lista de galardones que acumula este joven de Meaño, que ha quedado finalista en varios certámenes nacionales y que hace dos años obtuvo el premio Mágnum al mejor sumiller que otorga el Instituto Galego do Viño. Camiña lleva ya tres años trabajando en el restaurante Mugaritz, a donde llegó tras haber pasado por establecimientos gallegos de tanto prestigio como Casa Solla, el Culler de Pau o el Abastos 2.0, entre otros. Su trayectoria es impecable y se muestra muy satisfecho con el trabajo que actualmente realiza en el restaurante vasco, pues sostiene que está aprendiendo mucho. En este establecimiento trabaja también Tomás Ucha, el que quedó clasificado en segundo lugar en el certamen del Carlos Oroza. Ambos serán ahora los encargados de representar a Galicia en la final que se celebrará a nivel nacional en los próximos meses. Tras el concurso, que tuvo lugar durante la mañana de ayer, los dos jóvenes emprendieron el camino de regreso al País Vasco. «Agora estamos arrancando a tempada. É a época de viaxar moito. Volveremos a Galicia para ver se sae un proxecto aquí e estivemos xa en Portugal e en México», explica Caamiña, que se muestra encantando con el papel que él y su compañero desempeñaron en el concurso de sumilleres.