Persecución por el Ullán: dan el alto a un coche y su conductor emprende la huida amenazando a la Guardia Civil con una pistola de aire comprimido
VALGA
El hombre, detenido en Padrón, fue detectado por un agente de paisano que lo reconoció mientras conducía de forma temeraria por Valga
16 ene 2025 . Actualizado a las 20:34 h.Fue un guardia civil fuera de servicio el primero en detectar la presencia en la N-550 de un conductor temerario. El agente, del puesto de Caldas, circulaba por dicha vía, a la altura de Valga, cuando vio pasar en dirección contraria un coche que hacía extrañas y peligrosas maniobras. Al fijarse en el conductor, lo reconoció: lo conocía por motivos profesionales. Sospechaba que no tenía carné de conducir en vigor e, incluso, que el vehículo podía haber sido robado.
El agente dio la vuelta y comenzó a seguir al vehículo, al tiempo que daba parte de lo ocurrido, movilizando así a efectivos del Sector de Tráfico que se desplazaron siguiendo sus indicaciones. No tardaron en localizar la furgoneta, pero «el conductor ignoró las señales de alto y emprendió la fuga, iniciándose un seguimiento del vehículo por diversas carreteras de la provincia de A Coruña, realizando esta persona maniobras extremadamente temerarias, ocupando ambos carriles de circulación».
En un momento dado, según detalla el relato de la Guardia Civil, «el conductor esgrimió un arma de fuego llegando a apuntar con ella por la ventanilla, tratando de intimidar a los agentes que pretendían parar al vehículo». En ese momento, relata el instituto armado, «el conductor perdió el control total del vehículo, poniendo en riesgo a peatones, ciclistas y otros conductores de la vía por la que circulaba, llegando a circular por la acera». Además, «entró en una estación de servicio a gran velocidad, obligando a un turismo a realizar una maniobra evasiva para evitar una colisión frontal, volviendo a exhibir el arma y continuando su comportamiento peligroso y temerario».
La temeraria huida concluyó en el kilómetro 2,200 de la AC-305, en el término municipal de Padrón, «cuando el vehículo logró ser interceptado sin riesgo para los demás usuarios, abandonando el conductor el automóvil e iniciando la huida a pie por una finca privada portando el arma», que finalmente resultó ser una pistola de aire comprimido que simulaba ser real.
La Guardia Civil procedió a la detención del conductor como presunto autor de tres delitos contra la seguridad vial: conducción temeraria, circular careciendo del permiso de conducción correspondiente por pérdida total del crédito de puntos, conducción bajo los efectos de sustancias estupefacientes —pendiente del resultado del análisis en el laboratorio de referencia— y también, por supuesto, la incautación del arma.