Un proyecto de BATA permitirá a personas con autismo moverse en bus por Vilagarcía

VILAGARCÍA DE AROUSA

Las nuevas tecnologías ayudarán a acabar con las últimas barreras en la línea urbana que une Carril con Vilaxoán
24 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Hace unos meses, BATA colocaba a la comarca de O Salnés a la vanguardia de la tecnología al servicio de la inclusión de las personas con discapacidad. Una aplicación móvil permitía a las personas con autismo ganar independencia en sus puestos de trabajo, guiándolas en su día a día y evitando que tengan que depender de sus monitores. Siguiendo ese modelo, BATA, en colaboración con la Fundación Vodafone, sigue exprimiendo lo mejor de las nuevas tecnologías, derribando barreras y conquistando nuevos espacios de normalidad. Es el caso, por ejemplo, de los autobuses urbanos de la línea Carril-Vilaxoán. De la mano de la empresa Pereira, se ha desarrollado una aplicación que hará que esa red de transporte urbano sea accesible para las personas con autismo. Estas, utilizando sus terminales móviles, podrán leer códigos QR que les permitirán saber en todo momento dónde están y cuál es su destino, facilitándoles también la comunicación con el conductor. Un proyecto semejante se está desarrollando con el Hospital do Salnés. En este caso, se pretende secuenciar todo lo que pasa en una visita al hospital para que las personas con autismo puedan, gracias a una aplicación móvil, entender lo que está sucediendo a su alrededor y reducir así el estrés que acompaña este tipo de situaciones.
Una larga lista
BATA ha encontrado en la tecnología un nuevo aliado. Pero esta asociación ha sabido tejer, a lo largo de los últimos años, una amplia red de colaboradores. Particulares y empresas que se han dado cuenta «de que las personas con discapacidad tienen que adaptarse al mundo que los rodea, sí, pero de que ese mundo también puede dar pasos para hacerles esa adaptación más fácil». Quien así habla es Nacho Rey, responsable de empleo en BATA, y artífice de una gran variedad de proyectos que han abierto muchas puertas y desmontado muchos tópicos. Convenios de colaboración con empresas fabriles, con cadenas hoteleras, con cafeterías o con supermercados se han consolidado en una comarca en la que «la iniciativa privada se ha dado cuenta de que invertir en proyectos sociales los diferencia en el mercado».