El embalse de Caldas está al 51 % de ocupación, el dato más bajo de Galicia

La Voz

VILANOVA DE AROUSA

MÓNICA IRAGO

20 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El martes por la tarde, la lluvia hizo acto de presencia en la comarca de O Salnés. Los paraguas volvieron a aparecer en las calles, pero fue espejismo. Porque este año abril se ha sacudido el peso del refranero que dice que es el mes de las aguas mil. Y buena muestra de ello la encontramos en los datos de los embalses. El de Caldas, que abastece de agua a buena parte de la comarca de O Salnés, se encuentra a un 51 % de ocupación. Es, de todos los encoros que suministran agua a las poblaciones gallegas, el que registra el peor dato. El segundo puesto en el podio de baja ocupación lo ocupa la otra presa relacionada con el suministro a la comarca de O Salnés. El encoro de O Con se encuentra a un 75,8 % de ocupación. Solo el de Cecebre, que da de beber a A Coruña, tiene unas cifras similares: el resto de embalses de abastecimiento, incluido el Pontillón de Castro, superan el 90 % de ocupación.

Los datos del estado de estas estructuras, actualizados el martes, son una pieza más en un panorama meteorológico inusual. Tras un invierno particularmente seco, la primavera no está llegando tan cargada de agua como se la esperaba. Y no parece que el panorama vaya a cambiar, al menos, durante lo que queda del mes de abril: las previsiones de MeteoGalicia tanto para la zona de Arousa como para la de Pontevedra anuncian días de cielos más o menos cubiertos que irán dejando paso, a partir del domingo, a unas jornadas en las que lucirá de nuevo un sol radiante.

Unas cifras mínimas

Según los datos registrados por la estación de Corón (Vilanova), esta primavera apenas se han alcanzado los 60 litros por metro cuadrado, repartidos en nueve días en los que los paraguas salieron a la calle.

En la estación meteorológica de MeteoGalicia en Campolongo las cifras son muy similares a estas: unos 64 litros caídos desde que se inició esta estación, repartidos en seis jornadas.