
Los expertos creen que las estructuras podrán ponerse en valor
24 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Las excavaciones llevadas a cabo en el castro de Neixón el pasado de verano ya permitieron atisbar lo que han confirmado los trabajos desarrollados este año: la existencia de lo que posiblemente es un barrio metalúrgico. En la pasada campaña se encontraron restos de un horno y escoria que apuntaban a la existencia de actividad industrial en la zona, y la continuidad de los trabajos en ese sector ha propiciado nuevos hallazgos que apuntan en la misma dirección.
Restos de metales, tierra quemada y la estructura de una construcción importante, posiblemente de planta rectangular, confirman la presencia de actividad metalúrgica, seguramente de fundición de hierro, aunque habrá que esperar al análisis de los vestigios para concretar más. El arqueólogo Andrés Bonilla destacó además el potencial de ese sector del castro, ya que las estructuras estaban cubiertas por un empedrado de la época romana y eso ha permitido una mejor conservación, de manera que es posible que en el futuro puedan ponerse en valor y hacerse comprensibles para el público.
Por otro lado, este descubrimiento, sumado a las piezas halladas en veranos anteriores, refuerzan la hipótesis de que Neixón era un lugar dedicado al comercio.