Los locales dominaron, buscaron el empate por todos los medios, pero la fortuna, por tercera jornada consecutiva
21 oct 2018 . Actualizado a las 21:52 h.Como si se tratara de una maldición, el Puebla volvió a sufrir la misma fortuna que en los últimos tres partidos en A Alta. Los blanquiazules fueron superiores al rival, tuvieron un sinfín de ocasiones para sumar los tres puntos, pero cayeron una vez más por un escueto 0-1. El asedio pobrense no tuvo premio.
El choque comenzó con los barbanzanos dominando el esférico. Con dinamismo en la medular y presencia en ataque, las ocasiones fueron llegando. Espi tuvo la más clara para lograr el 1-0 en el primer tiempo. El sonense se lanzó a presionar la salida del balón a un zaguero, que intentó despejar con la mala fortuna de que el balón cayó a pies del delantero. Después de fintar al central, y cuando Viturro esperaba para empujar a la red, disparó fuerte, por encima del arco defendido por Hugo.
Después otras intentonas de Viturro y Pap llegó el solitario tanto del Ribadeo. Lo hizo con un rechace, que rebotó en Piñeiro y que supuso el 0-1. Fue una de las pocas ocasiones claras del Ribadeo, que se aprovechó de un Puebla que sigue con problemas para vencer en su propio feudo.
No cambió demasiado el guion tras el descanso. Los locales dominaron, buscaron el empate por todos los medios, pero la fortuna, por tercera jornada consecutiva, esquivó al bloque de A Alta, que debe seguir peleando.