Un café y una buena charla: así es el programa que lucha con la soledad de los mayores barbanzanos
BARBANZA
El servicio de acompañamiento de la Asociación Valores atiende a cerca de 50 personas de más de 60 años en la comarca
12 mar 2023 . Actualizado a las 13:57 h.Si bien es cierto que el cuidado de los mayores es de vital importancia en una comarca tan envejecida como es la de Barbanza, en ocasiones, quienes se valen por sí mismos lo único que necesitan es una dosis de buena compañía.
El problema de la soledad no deseada, especialmente en la población de mayor edad, es de aquellos que parecen no tener fin. Por ello, hay propuestas como la de la Asociación Valores, que intentan servir de parche para una situación que, desgraciadamente, es más que habitual.
«A nosa función é realizar un acompañamento a persoas maiores de sesenta anos en situacións de soidade. O noso labor non é coidalos senón pasar tempo con eles, como reforzo na súa vida diaria». Así define Zeltia Fernández, trabajadora social del Programa de Acompañamento a Persoas Maiores Soas, una iniciativa financiada por la Xunta y que es completamente gratuita para los vecinos de la comarca.
Labores cotidianas
En cuanto a qué tipo de actividades realizan las tres auxiliares con las que cuenta actualmente el programa, la trabajadora social asegura que se trata de acciones cotidianas, pero que resultan importantes para los mayores que viven solos: «Falamos de cousas tan sinxelas como ir a tomar un café ou dar un paseo, ou mesmo axudando con cuestións de papeis, que ás veces son tarefas que lles poden custar algo máis».
En cuanto a la cantidad de personas que reciben este servicio en la comarca, son ya 50 entre todos los concellos, siendo Ribeira el núcleo con mayor concentración de usuarios, con un total de 25 mayores.
Previsiones de futuro
Con todo, admite Zeltia Fernández, la idea es ir ampliando este programa tanto en duración, ya que está financiado por seis meses, como en la cantidad de mayores a los que atiende: «Encantaríanos que seguise medrando, porque consideramos que, actualmente, a soidade nas persoas maiores é un problema moi grave. Está moi ben a soidade, menos cando non se trata dunha situación voluntaria».
Sobre cómo es el trabajo en esta iniciativa, una de sus auxiliares, Matilde García, señala que resulta un trabajo muy gratificante: «Ellos te abren sus vidas, te cuentan si tienen hijos, dónde están, cuándo perdieron a su marido o a su mujer... La verdad es que es bonito porque, la mayoría de veces, lo único que quieren es algo tan sencillo como que los acompañes al médico, que vayas de paseo con ellos o que te pares a hablar un rato».
En cuanto a la frecuencia de estas visitas, Zeltia Fernández señala que, pese a que depende de la disponibilidad de las auxiliares, lo ideal son tres veces a la semana de forma individual: «Con todo, é un servizo flexible, porque se a usuaria se leva xenial coa veciña e as dúas poden camiñar perfectamente, non habería problema en saír todas de paseo».
Las auxiliares de este programa atenderán también a usuarios de centros como la residencia DomusVI o el aula de estimulación cognitiva situada en Aguiño.
Pepa Casais, usuaria: «Tengo 70 años y me valgo yo sola, pero agradezco muchísimo la compañía»
La ribeirense Pepa Casais es una de las personas que reciben el servicio de acompañamiento de la Asociación Valores, un programa al que se apuntó «sin pensarlo ni un solo segundo».
«Yo estoy encantada. Tengo setenta años y me valgo yo sola, pero agradezco muchísimo la compañía. Los inviernos, sobre todo, son duros, y en cuanto a mi auxiliar, es como si me la pusieran a medida, nunca nos quedamos sin temas de conversación».
En cuanto a qué actividades hacen habitualmente, Pepa Casais admite que depende del tiempo: «A veces damos un paseo, y otras se queda aquí conmigo, charlando y tomando un café. Yo no la conocía, pero la verdad es que congeniamos muy bien».