Llega la peligrosa operación bikini a Barbanza: «Vienen personas que quieren perder seis kilos en una semana por una boda»
BARBANZA
Nutricionistas de la comarca advierten del peligro de las dietas milagro
26 abr 2023 . Actualizado a las 17:39 h.Se acercan los meses de verano y las capas de ropa comienzan a sobrar. Esta transición, que no siempre es sencilla, provoca que año tras año haya quienes, no contentos con sus cuerpos, se dispongan a cambiarlos.
Sin embargo, la magia no existe, y no se puede pretender un cambio radical en apenas tres meses. Es lo que indican algunos de los nutricionistas de la comarca, que ven como, año tras año, se repite el fenómeno de la llamada operación bikini.
«Es algo que vemos todos los veranos. Cuando llega la primavera, repunte de gente». Es lo que indican desde Natur House, en Noia, donde cada año ven aparecer por la puerta a quienes tienen un objetivo marcado, sea este realista o no.
«Cuando llega esta época es común. Me llaman fuera de horario, diciendo que quieren empezar lo antes posible y que necesitan perder cinco kilos, como si el contexto no fuera importante». Es lo que indica Denis Mariño, nutricionista instalado en Ribeira que trata de sacarles estas ideas de la cabeza a quienes aparecen por su centro: «En la primera consulta les comento que esa no es mi forma de trabajar, que hay que ir poco a poco y convirtiendo el proceso de pérdida de peso en secundario mientras se aprenden hábitos sanos».
Bodas y otros eventos
Estas situaciones también las vive Sandra Varela, del Centro Dietético Boiro, donde una vez se acerca la época de eventos, llegan las llamadas: «Aparecen personas diciendo que quieren perder seis kilos en una semana para una boda. Preguntan qué hacer para conseguirlo, y la respuesta en sencilla: acordarte antes. El metabolismo no es tan rápido y traen esas ideas de casa por lo que leen en internet, dietas milagro que nadie debería creerse».
Estas dietas rápidas, caracterizadas por ser muy restrictivas, son, además de inefectivas, muy peligrosas para la salud, como indica Sandra Varela: «No es una cuestión de hacerlo para la boda y después volver a engordar. Esto no es sano para el cuerpo, pero tampoco para la mente. Se produce el llamado afecto yoyó, se engorda todo de vuelta, y se convierte en un proceso muy frustrante y que provoca muchos sentimientos negativos».
En cuanto a quiénes aplican más este tipo de métodos peligrosos para adelgazar, Denís Mariño no tiene dudas: «Son chicas en el 99 % de los casos».