Posmarcos no falló a su cita anual con A Mercé

M.G. RIBEIRA

BARBANZA

Decenas de personas participaron a última hora en la procesión de las velas

25 sep 2023 . Actualizado a las 17:17 h.

Puede que las celebraciones religiosas vivan una época de cierto desapego por parte de la sociedad, cada vez menos implicada en la práctica de los ritos católicos. Sin embargo, esta percepción queda del todo desacreditada en jornadas como la de este domingo, en la que una de las citas más relevantes y tradicionales del calendario contó con una amplia participación. Y es que la parroquia pobrense de Posmarcos no falló a su cita anual con Nosa Señora da Mercé y se implicó de lleno en los actos organizados.

En los días previos faltaban hombros para portear la imagen de la santa y se buscaban voluntarios para garantizar que la virgen pudiese salir en el tradicional desfile hasta el cruceiro, pero a la hora de la verdad quedó demostrado que la devoción mueve montañas y las procesiones se desarrollaron sin mayores contratiempos, tanto la de la mañana, como la vistosa comitiva de las velas a última hora de la tarde.

De hecho, esta última era la procesión más esperada y la que congregó a más público en la capilla de A Mercé, primero para la misa solemne, oficiada por el párroco, Marcelino Sánchez, y luego para el recorrido iluminado con la luz de las velas de los feligreses. Aunque amenazaba lluvia tras una tarde inestable, pudo celebrarse con normalidad y tuvo su punto álgido con la tirada de fuegos artificiales en honor de la Virgen, que los costaleros sostuvieron mirando al mar mientras la pólvora brillaba en el cielo.

Finalizada la parte religiosa, el Dúo Charada se disponía a poner el broche musical a la jornada.