Ana Isabel Rodríguez, una boirense que lidera un proyecto nacional contra el párkinson: «O importante son os doentes»
BARBANZA
La experta en farmacia forma parte de un equipo de investigación que busca mejorar la calidad de vida de los pacientes
12 nov 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Ya lo decía Forest Gump, «la vida es una caja de bombones». A veces tocan etapas dulces y felices y otras en las que un traspiés, un cambio en la textura o el sabor, pueden traducirse en un golpe amargo para una familia entera. Quien un día está en una boda pasándoselo en grande o incluso casándose al siguiente puede estar en un hospital recibiendo uno de esos diagnósticos que nadie quiere escuchar.
Ese tipo de escenarios son lo que siempre ha querido cambiar la investigadora del Grupo de Neurobioloxía Molecular e Celular da Enfermidade de Parkinson del CiMUS y profesora del departamento de Ciencias Morfolóxicas de la Universidade de Santiago, Ana Isabel Rodríguez, que desde pequeña supo que lo suyo era el ámbito sanitario: «Cando era rapaza era un pouco rara, non me gustaban as bonecas convencionais, pero si unha que tiña unhas marcas vermellas nas cachas que se lle quitaban cando lle botabas unha pomada, fascinábame».
La boirense, nacida en Cabo de Cruz, reconoce que parte de su vocación nace de la pasión que una docente le ponía a las clases de Física y Química, que eran impartidas al 100 % en el laboratorio del centro, lo que las hacía mucho más interesante para los alumnos: «Facíanos pensar con experimentos sinxelos, era capaz de espertar en nós esas ganas de facer cousas».
A los 13 años tuvo que mudarse con sus padres a Santiago lo que la llevó a hacer BUP y COU, en un instituto de la capital gallega. Años después llegaría el momento de escoger carrera. Su elección fue Farmacia, y tanto le gustó la experiencia que acabó doctorándose. Aunque su tesis versaba sobre mejorar la administración de medicamentos por vía ocular, acabó firmando un contrato como investigadora en un equipo especializado en la enfermedad de Párkinson: «Cando empecei a facer estudos clínicos exploratorios con doentes dinme conta de que era algo moi alentador e reconfortante».
En la actualidad, la barbanzana lidera un proyecto financiado por el Instituto de Salud Carlos III cuyos resultados señalan que algunos tratamientos antihipertensivos tienen un efecto neuroprotector. Concretamente, su papel ha sido analizar por qué aquellas personas que padecen síndrome metabólico, es decir, que presentan más de tres de los siguientes factores de riesgo: diabetes, colesterol alto, hipertrigliceridemia, obesidad o hipertensión, tienen más riesgo de tener párkinson en el futuro.
La experta señala que los afectados por este tipo de problemas presentan altos niveles de unos autoanticuerpos capaces de promover fenómenos de neuroinflamación, incremento del estrés oxidativo y finalmente, la muerte de las neuronas dopaminérgicas, que utilizan la dopamina como neurotransmisor y son las más vulnerables a este trastorno
Biomarcadores
La boirense explica que cuando esta enfermedad se manifiesta, significa que ya han fallado el 50 % de estas células cerebrales. Es por eso que el próximo objetivo de su investigación no es otro que desarrollar un panel de biomarcadores que permitan predecir el inicio o nivel de progresión de la dolencia.
Llevar a cabo la hazaña supondría la creación de una herramienta muy útil con la que ayudar a prevenir este mal utilizando medicamentos e invitando a los individuos en riesgo a llevar un estilo de vida saludable.
Este recurso permitiría determinar de forma fiable la presencia o nivel de desarrollo de la enfermedad a partir de una muestra obtenida a través de un análisis de sangre así como el diseño de tratamientos a medida en función de cada caso.
Para que todos estos nuevos descubrimientos calen en la población, la experta da especial importancia a la celebración de actos públicos, por eso ella misma asistirá la semana que viene al Primer Foro de Enfermedades Neurodegenerativas organizado por la asociación de pacientes de Santiago, la ACEM.
Rodríguez, que durante la conversación no para de repetir esta misma palabra, mira con ilusión el encuentro, en el que podrán participar tanto personas afectadas como investigadores clínicos y básicos: «O importante son os doentes, nós traballamos para darlles unha mellor calidade de vida e para que non se sintan sós».