Afrentas

Alicia Fernández LA CRIBA

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Si hubiese un mínimo de sentido común, de rigor y responsabilidad, el puente de Catoira y el vial deberían ser asumidos por la Xunta

19 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo del puente de Catoira, que une la provincia de Pontevedra con la de A Coruña por una vía con altísima circulación al ser el enlace más rápido de las comarcas del Barbanza y Muros-Noia con Pontevedra, Vigo y Portugal, daría para escribir un cuento de miedo. Desde los problemas de su gestación a que a día de hoy nadie quiere figurar de padre y madre de una criatura a la que hay que mantener y presenta gravísimas deficiencias. Porque vivimos en un mundo donde políticos sin más preparación que hacer la o con un canuto mandan, ordena y hacen saber.

Si hubiese un mínimo de sentido común, de rigor y responsabilidad esa infraestructura y el vial deberían ser asumidos por la Xunta. Pero eso es como esperar peras del olmo o que a mí me vuelva a salir mi, otrora, precioso pelo negro.

Enésima reparación, ahora de las juntas de dilatación —más bien separación— que amenazan el puente y se suman al firme, al hundimiento y a una capa de rodadura en sempiterna rehabilitación. Pero nada dice esa Xunta que —¡ahora!— reclama la transferencia de la AP9 a todo pulmón, la misma que ni abrió la boca cuando el prepotente Aznar amplió la concesión 25 años sin que a día de hoy sepamos por qué, una de las mayores afrentas al pueblo gallego, y que ahora, mira tú, la UE dice que fue ilegal.

El ínclito expresidente, que cada día se parece más a una caricatura de si mismo, con la prepotencia como bandera, yendo de plató en plató, de micrófono en micrófono, dando clases de ética, rigor y democracia. Qué lástima que un Hurtado o, al menos, un Peinado no tiraran de ese hilo que más bien parece una estacha de petrolero.