Tejerina se «impresiona» en Jealsa

María Hermida
maría hermida RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

La titular de asuntos pesqueros visitó la conservera y no dejó de hacer preguntas; hasta se interesó por si las máquinas eran o no españolas

10 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

A la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina que el domingo se dio cita en la Feira do Cocido de Lalín, le tocaba ayer vivir una mañana maratoniana en la ría de Arousa: visitó Boiro, cruzó el estuario en barco, estuvo en una batea y posteriormente completó la agenda mariscando en O Salnés. Quizás por ello, tanto ella como la conselleira de Mar, Rosa Quintana, venían preparadas para la ocasión: ropa cómada, cazadoras polares y nada de tacones. Así llegaron, con puntualidad británica, a Jealsa a las nueve de la mañana. Encabezaron, junto a los anfitriones, una amplia comitiva que recorrió la factoría de cabo a rabo. De guiarlas se encargó el presidente del grupo conservero, Jesús Alonso, y el consejero delegado, Jesús Manuel Alonso. La visita duró más de una hora. Y, al acabar, la frase que dijo García Tejerina fue elocuente: «Es impresionante, impresiona mucho, mucho».

El recorrido comenzó por la división de comida para mascotas, la llamada Pet Food. Junto con Jesús Alonso y Jesús Manuel Alonso, García Tejerina y Rosa Quintana abrían paso a una comitiva en la que también estaban, por ejemplo, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, el subdelegado coruñés, Jorge Atán, el secretario general de Pesca, Andrés Hermida, el secretario xeral de Mar, Juan Maneiro, o el alcalde de Boiro, Juan José Dieste. García Tejerina y Quintana no dejaron de hacer preguntas. Jesús Manuel Alonso les contó, conforme en las máquinas se iba viendo pasar las materias primas que luego conforman los alimentos para las mascotas, que la innovación está a la orden del día en este sector. «Hacemos productos muy novedosos, por ejemplo, con frutas», señaló. Y la conselleira reparó en que este tipo de producción no genera mal olor.

Luego, tocó adentrarse de lleno en la conservera. Lo vieron todo, desde cómo llega el atún entero a cómo se corta, cuece, limpia, envasa, esteriliza y empaqueta. Jesús Alonso dio algunos datos a la comitiva. Explicó, por ejemplo, que la planta de O Bodión tiene capacidad para elaborar 1.100 toneladas de atún al día.

 

 

Otras materias primas

 

 

Jesús Alonso contó también que la factoría de O Bodión está dedicada en exclusiva a este producto. Y que en la fábrica de A Pobra se elaboran otras materias primas, como por ejemplo mejillón. García Tejerina quería saberlo casi todo, preguntó si para procesar mejillón se necesita más mano de obra por la necesidad de abrirlo. E incluso se interesó por la procedencia de las máquinas punteras del grupo. «¿Se hacen en España o tenéis que ir a otro lado a por ellas?», preguntó. Se le explicó que algunas sí son de fabricación nacional y otras sí o sí deben venir de fuera porque aquí no se hacen.

 

Eso dio pie a que Jesús Alonso contase también dónde y cómo consiguen los famosos solapines -los cierres de todas las latas de Jealsa, mucho más cómodos que los envases tradicionales de conserva- o los briks para el atún en cubos. Y para que agradeciese la confianza que Mercadona deposita en su empresa.

 

 

 

 

Un ejemplo empresarial

 

 

García Tejerina no se marchó de O Bodión sin firmar en el libro de honor ni sin explicar por qué visitó Jealsa. Dice que lo hizo «porque es una empresa puntera en España, un ejemplo de trayectoria empresarial y una firma importantísima para la economía local, gallega y española». Indicó que por su cargo visitó numerosas empresas del ramo de la alimentación y que, aún así, se marchaba «impresionada» de la factoría de O Bodión. Enfatizó también que Jealsa ha sabido «innovar, crecer y, en general, hacer las cosas muy bien». Animó a sus máximos responsables a continuar en la misma línea.

 

Habló también, cómo no, de la importancia del empleo que genera el grupo conservero, «además casi todo femenino». Minutos antes, en el recorrido por la fábrica, había hablado con algunas de las trabajadoras, que limpiaban atún. Les preguntó si estaban a gusto en sus puestos. Y se fue contenta con la respuesta.