Boiro resiste y aguanta el tirón festivo pese a la lluvia

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

El mal tiempo deslució la verbena del lunes, animada por Charleston y Assia, y obligó a trasladar el espectáculo infantil

09 jul 2024 . Actualizado a las 17:08 h.

Habían tenido suerte los boirenses los últimos años, cuando disfrutaron de las fiestas sin ni siquiera tener que mirar al cielo, pero en esta ocasión, la lluvia que está aguando el verano a los barbanzanos hizo acto de presencia en las celebraciones y acabó aguando algunas de las actividades destacadas. La más perjudicada por ahora fue la verbena del lunes, animada por las orquestas Charleston Big Band y Assia, que solo se animaron a seguir un grupo de valientes.

El mal tiempo se dejó notar ya en la recta final de la sesión de disyoqueis que puso el colofón al Día das Peñas, pero la lluvia y el frío ganaron intensidad cuando llegó la noche. En la plaza de Galicia, con la Charleston sobre el escenario, los espectadores se concentraron principalmente en los soportales de la casa consistorial y bajo la cubierta del parque infantil. Solo unos cuantos osados se atrevieron a bailar delante del palco. La orquesta, que está celebrando su 40 aniversario, no defraudó y ofreció un variado repertorio, dominado por los temas del momento.

Pese a ser menos conocida en la comarca, Assia también dejó buen sabor boca. De su mano, los asistentes a la verbena rememoraron las canciones que más sonaron en la década de los 90. Esta agrupación, al igual que los conciertos tributo que forman parte del cartel de las fiestas de este año, llegó a Boiro de la mano de la firma barbanzana Cantaruxa Espectáculos.

Vandalismo callejero

La lluvia aguó la verbena, pero la fiesta se vivió con intensidad en los locales hosteleros de la villa. Hubo algunos noctámbulos que incluso dejaron su huella en el mobiliario urbano. El martes amaneció con señales de tráfico torcidas, plantas de las jardineras arrancadas y maceteros tirados. Los actos de vandalismo, sumados a los restos de botellón esparcidos por puntos estratégicos del casco urbano, obligaron a la brigada de limpieza a esforzarse durante las primeras horas.

El mal tiempo provocó alteraciones en las actividades diurnas del martes. Los niños tuvieron que resguardarse en la casa de cultura para seguir el espectáculo A maxia de Ian e Elisa, que iba a tener lugar al aire libre. Sin embargo, Arume y A Dorniña de Abanqueiro desafiaron a la lluvia y mantuvieron sus animados recorridos por calles y bares. «Dá rabia que o tempo non acompañe, pero contra iso non podemos loitar», lamentaba la concejala de Cultura, María Outeiral.