








































La cena de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) reunió a más de 200 personas en Chicolino
30 ago 2025 . Actualizado a las 16:38 h.Que la solidaridad no está reñida con la diversión es algo sabido, pero la cena de la Asociación Española Contra el Cáncer de Boiro que se celebró este viernes en Chicolino fue un magnífico ejemplo de ello. La respuesta al llamamiento de la entidad fue masiva, con un salón abarrotado por 226 comensales, y estuvo coronado por una fiesta inagotable. Todo ello por una buena causa: recaudar fondos para la investigación y para prestar servicios a pacientes de cáncer y sus familias.
La presidenta de la AECC de Boiro, Marisa Lojo, se mostraba encantada con el resultado de la celebración. Agotada tras las jornadas de preparativos y la propia fiesta, que se prolongó más allá de las cinco de la madrugada, Lojo estaba más que satisfecha con el resultado de la cita anual, en la que se vieron muchos rostros nuevos: «Houbo moita xente e moi animada, e tamén moitas persoas que non viñeran nunca e, sobre todo, xente moza». Porque para la solidaridad no hay edad, pero siempre es una buena noticia comprobar que hay relevo, y en Boiro lo hay.
Falta conocer la recaudación total, porque están por contabilizar las rifas vendidas para el sorteo de los múltiples regalos donados por los negocios de la localidad para colaborar con la causa: «Creo que non nos quedou ningunha tenda de Boiro que non doara regalos para o sorteo, había de todo, cestas de froita, lotes das farmacias, xoierías...», enumeraba Marisa Lojo, que se alegraba de que todo hubiera salido tan bien: «Contabamos con que viñera menos xente e estaba o comedor chego, e vendéronse moitas rifas, a palabra solidaria abranda á xente». La cita fue un éxito, también para los asistentes, que la disfrutaron al máximo: «A cea foi espectacular e o servizo e todo tamén. A xente estaba moi animada, eu marchei ás catro da mañá e outra compañeira ás cinco e a festa aínda seguía».