Pase lo que pase el 7 de julio, el Concello tendrá de nuevo una alcaldesa
22 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Aunque cada vez es más frecuente ver a mujeres encabezando candidaturas y poniéndose al frente de gobiernos municipales, las alcaldesas siguen siendo minoría en Galicia y en el próximo mandato habrá 65, frente a 235 hombres. Por ello cobra más relevancia el hecho de que en Muros ellas ostenten el mando desde hace 12 años, y seguirán haciéndolo durante los próximos cuatro, completando más de un lustro de gobiernos consecutivos liderados por mujeres.
Fue en el 2004 cuando Muros tuvo por primera vez una alcaldesa, Caridad González, por aquel entonces número dos del PSOE y que llegó al cargo tras el fallecimiento de su antecesor. Fue el inicio de una trayectoria de marcado acento femenino en el que tan solo hubo un paréntesis, el mandato 2007-2011. En aquel año, una alianza entre BNG y PP situó al frente del gobierno municipal al nacionalista Domingos Dosil.
Fue la única excepción en una corporación en la que las mujeres llevan años llevando la voz cantante, y no solo en la alcaldía. No en vano, hace cuatro años las cabezas de lista de las cuatro candidaturas que concurrieron a los comicios eran mujeres. El pasado mes de mayo fueron tres, y con toda seguridad una de ellas ostentará el bastón de mando de aquí al 2027.
Socialistas y nacionalistas continúan las conversaciones en busca de un pacto
Es seguro que quien presidirá el próximo ejecutivo de Muros será una mujer —el escaño obtenido por Manuel Lago es irrelevante en términos numéricos para formar gobierno—, pero todavía está por decidir quién ocupará el sillón de la alcaldía. Socialistas y nacionalistas continúan las conversaciones en busca de un pacto que, a priori, daría el bastón de mando a la candidata del BNG, María Lago, pero el acuerdo todavía no está cerrado.
Caridad González, primera alcaldesa de la historia de Muros, no renuncia a volver a ocupar ese puesto. De hecho, en las negociaciones que se han llevado a cabo desde que se conoció el dictamen de las urnas planteó al PP la posibilidad de llegar a un acuerdo y establecer una alcaldía bianual, que Inés Monteagudo ostentaría dos años y ella otros dos.
La propuesta, que garantizaría a los populares mantenerse en el gobierno, ha sido rechazada, al menos por ahora, así que el PSOE avanza en las negociaciones para que el pacto con el BNG llegue a buen puerto.
Las condiciones de ese posible acuerdo estaban ya bastante adelantadas y quedaban detalles menores por cerrar, pero el retraso de la fecha de investidura hasta el 7 de julio está retrasando una firma que González espera que se produzca la próxima semana.
Inés Monteagudo (PP, 2019-2023) Una pionera para los populares
A la espera de lo que ocurra con posibles pactos, está en disposición de retener el bastón de mando como cabeza de lista de la candidatura más votada el 28M, pero lo que nadie podrá arrebatar ya a Inés Monteagudo es el hecho de que hace cuatro años hizo historia al darle al PP su primera alcaldía en el Concello de Muros. Entre sus logros en el pasado mandato, conseguir aprobar los primeros presupuestos en seis años. Pese a mejorar los resultados electorales y ganar un concejal, no tiene garantizada la continuidad al frente del gobierno.
Caridad González (PSOE, 2004-2007 / 2011-2015) La primera en acceder al cargo
La socialista Caridad González fue la que abrió el camino a las demás candidatas de Muros, ya que fue la primera mujer en ocupar la alcaldía. Lo hizo en el 2004, tras el fallecimiento de Celestino Formoso, que había sido investido un año antes. Le tocó a ella asumir el mando tras su muerte y lo hizo hasta que, en el 2007, un pacto entre BNG y PP la apartó. No tardó en volver a ponerse al frente del ejecutivo local, ya que recuperaría la alcaldía cuatro años más tarde, en el mandato 2011-2015, durante el que gobernó en minoría.
María Xosé Alfonso (Compromiso, 2015-2019) Regidora por sorpresa
En lo que respecta a la política, en Muros nadie da nada por seguro después de que en el 2015 la entonces candidata de Compromiso por Galicia, María Xosé Alfonso, se hiciera con el bastón de mando contra todo pronóstico y por sorpresa mayúscula. El mismo día de la investidura, se daba por hecho que el PP accedería a la alcaldía por ser la lista más votada, pero en el último momento el PSOE apoyó la propuesta de Compromiso. Alfonso ya había tenido responsabilidades en el gobierno que encabezó el nacionalista Domingos Dosil.