Los comuneros de Argalo cuentan con permiso de Patrimonio
06 nov 2025 . Actualizado a las 16:33 h.Un aviso vecinal puso en alerta al Concello de Noia sobre la tala de árboles realizada en el entorno de A Cova da Moura, declarado bien de interés cultural (BIC). El concejal de Medio Ambiente, Abel Pan, junto con un técnico de su departamento, Policía Local y representantes del distrito forestal se desplazaron al dolmen para levantar acta de lo ocurrido. «Temos un compromiso co medio ambiente e co patrimonio que nos obriga a estar vixiantes, e iso foi o que fixemos», defiende el alcalde, Francisco Pérez.
Después de ahondar en el asunto, el gobierno local comprobó que no existe ninguna irregularidad, que la tala se realizó con todos los permisos en regla y cumpliendo criterios técnicos.
Según explica el arqueólogo del proyecto de control arqueológico que la comunidad de montes de Argalo presentó para poder realizar la actuación, Manuel Lestón, el colectivo y el Concello de Noia tienen vigente un convenio sobre los terrenos en los que se ubica A Cova da Moura.
Los comuneros tienen derecho al aprovechamiento forestal, por lo que a través de una empresa procedieron a cortar 26 pinos y dos eucaliptos en las inmediaciones del monumento. Lestón señala que los ejemplares alcanzaban los 25 metros de altura y algunos se encontraban a diez metros del dolmen, por lo que la intervención, señala, «supón unha mellora porque eliminouse a ameaza de que unha árbore desas dimensións puidese caer sobre o dolmen».
El regidor anuncia que se aprovechará para adecuar el entorno de A Cova da Moura, que «non contaba co coidado que merece».