Dos mil escolares pasaron en los meses de mayo y junio por este nuevo espacio de aprendizaje, instalado en la antigua unitaria
03 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Por el Aula Didáctica del Neolítico, que estrenaron hace unos meses en Borneiro (Cabana), pasaron tantos niños en ocho semanas como en cualquier otro centro de interpretación en todo un curso escolar. Lo explicaba ayer en Dombate Beatriz Gómez, de Galipat, la empresa de servicios culturales Galipat, que fue la que se encargó de gestionar las actividades y obradoiros que se llevaron a cabo en el espacio didáctico durante mayo y junio.
Por iniciativa del Concello, y gracias a un convenio con la Deputación, reconstruyeron en la planta baja de la antigua unitaria de Borneiro una cabaña neolítica para presentar de forma real y didáctica «un espazo onde os rapaces non tiveran que imaxinar os contidos, senón que puideran ver, tocar, escoitar e explorar con todos os seus sentidos a forma de vida dos nosos devanceiros», expresaban desde Galipat.
Alrededor de 2.000 niños, estiman desde la empresa, y desde diferentes centros educativos, pasaron por el aula durante las ocho semanas en las que estuvo activo el proyecto. «Unha cifra como a que faría calquera centro de interpretación arqueolóxico normal en seis ou sete meses», explicaba ayer Beatriz Gómez, encargada de los talleres, que dividían en una parte teórica y otra práctica.
En la planta baja, donde está instalada la cabaña, se empapaban de los elementos típicos de la vivienda e incluso ejemplificaban tareas cotidianas ellos mismos para llevarse una impresión mucho más realista. Después, en la parte alta, participaban en diferentes talleres: de cerámica, de excavación arqueológica, de tejido, de música, de pintura e incluso de caza. En el caso del obradoiro de excavación o de tejido, los alumnos emplearon réplicas de instrumentos 100 % reales, aunque adaptados a una escala más pequeña para que pudieran ser utilizados por los estudiantes.
El éxito de la iniciativa fue tal, que ya hay grupos interesados en acudir para el año que viene, según explicaba ayer Lito Eiroa, guía en Dombate, aunque las fechas todavía no están concretadas, pues dependen del convenio a firmar con la Deputación. «En todo caso, queremos que sexa en primavera e expandir máis as datas», decía el alcalde, José Muíño, durante su intervención.
Gracias, también en parte, a la buena acogida de este proyecto, el número de visitantes a Dombate se han mantenido en cifras récord durante los últimos meses (2.428 en septiembre) y esperan alcanzar los 29.000 a final de año.