Axi Muniain: «Este trozo de tierra que se adentra en el mar cautiva y te empuja a volver»

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

CARBALLO

JAVI GOYA

El deportista vasco lanza el proyecto SurFaros que promete proyección mundial para la zona

05 nov 2019 . Actualizado a las 05:05 h.

Mientras la gran mayoría de los mortales trata de huir de los temporales y refugiarse, Axi Muniain (Zarauz, 1982), los busca. Persigue las olas gigantes que se forman con las ciclogénesis invernales para surfearlas como lo que es, uno de los mayores especialistas de todo el mundo, que ahora tiene su vista fijada en la Costa da Morte y en general en toda la mitad norte de Galicia, desde la playa de Carnota hasta más allá de la frontera asturiana.

«Este trozo de tierra que se adentra en el mar haciéndolo hervir, es a su vez una tierra amiga que cautiva y es su naturaleza, cultura y gente la que te empujan a volver», asegura para empezar a explicar SurFaros, su último proyecto centrado en la zona, que al margen de un reto deportivo para él, aspira a convertirse en un catálogo de las excelencias turísticas de la zona de alcance global, a caballo de las decenas de miles de seguidores que tiene por todo el mundo.

«Estos bajos que tantos estragos ocasionan, además de generar olas de gran dimensión, dan lugar a un espectáculo náutico genuino. Con enormes desplazamientos de agua y mutaciones casi impredecibles, con un poderío descomunal. Estas rompientes son el contexto perfecto para llevar a cabo este desafío extremo e innovador en olas gigantes. Donde uno de los retos principales es reunir todos estos aspectos previamente mencionados en un simple clic, es decir, en la captura de una instantánea que rendirá homenaje a la historia de este tramo de costa», detalla el deportista que, como en todo lo que hace, no se está encontrando precisamente un camino de rosas.

La semana pasada sin ir más lejos, desplazado como tantas veces antes a la Costa da Morte para capturar esa instantánea soñada a lomos de una gran ola, le tocó experimentar esas dificultades. «De tres motos que teníamos se chafaron dos. Al final decidimos hacernos al mar igual con una de tres y la verdad es que estamos bastante contentos porque aún tuvimos tiempo de coger unas olitas».

Acto seguido pusieron rumbo al País Vasco, «porque las previsiones decían que podría haber condiciones más favorables allí», pero esta semana han regresado ya a Galicia, que para el propio Muniain tiene «los ingredientes perfectos» para lo que buscan.

Y es que detrás del proyecto, además de su talento sobrehumano hay mucho trabajo y un gran equipo. El legendario surfista australiano Ross Clare Jhones es su compañero oficial de aventuras, pero tiene también el respaldo habitual del marroquí Jerome Sahyoun, además de reconocidos invitados puntuales.

«La pasión mostrada por la ola grande, la compenetración con el equipo y sus valores nos llevaron a hacer partícipes del proyecto al surfista local de la Costa da Morte Marcos Heinrich y su compañero Carlos Fernández, un andaluz enamorado de Galicia que lleva cinco años afincado aquí. Compartimos con ellos hallazgos y conocimientos de la costa, infraestructura logística y formación de arrastre y rescate», señala el Zarauz, quien considera que esta representación autóctona les permite «comunicar en gallego y abanderar los logros y hallazgos».

Muniain ya demostró a través de los proyectos de Illa Pancha, «que están aquí para quedarse» que las olas gallegas pueden llegar a los Óscar del surf, los XXL Big Wave Awards, y ahora está convencido de que la Costa da Morte puede ser la alternativa perfecta a Nazaré (Portugal), porque surfistas de todos los continentes desplazados allí pueden encontrar aquí «otros desafíos y un lugar para despejar la mente».