Los llamativos escalones que se observan estos días en muchas playas de la zona, con regresión de la arena y piedras que normalmente están cubiertas a la vista, son un fenómeno completamente natural del que no hay que preocuparse en absoluto, según científicos y entendidos del mar. De hecho, el geólogo Vidal Romaní explicaba ayer en estas mismas páginas que las regeneraciones de playas con arena es poco menos que tirar dinero al mar.
«Con mareas grandes e ventos do sur o mar leva a area, pero non hai nada de que preocuparse, nin facer caso de bobadas, como lle teño oído a algún científico, porque do mesmo xeito que a leva tráea de volta. Nunha semana de vento do noroeste todo o que agora está destapado pode volverse a tapar», explica el marinero José López, de Sardiñeiro, que tiene la prueba en la rampa que da al mar al pie de su casa.
«Os ventos de terceiro e segundo cuadrante levan, e os de cuarto e primeiro traen», dice López, que tiene una anécdota simpática al respecto. «Un médico de Santiago que me coñecía díxome: “Compré una casita en Portosín y la pagué bastante cara porque tenía una pequeña playita, y ahora voy y no hay playa”. Díxenlle que estivese tranquilo, que a praia non lla levou ninguén», bromea.
El exalcalde fisterrán y biólogo marino José Manuel Traba coincide en líneas generales, aunque matiza que cuando se hace una regeneración con arena obedece a un estudio previo y, en ocasiones, se demuestra que algo de efecto tienen. Señala que se trata de movimientos naturales y que las playas habitualmente regeneran por sí mismas. «Ás veces, cando volve a area enche a praia, pero o que non se mantén é a estrutura da duna, e tardan moito máis tempo en recuperarse», explica, al tiempo que apunta que playas como la de O Rostro o Mar de Fóra «son moi dinámicas», y mueven cada año muchísimas toneladas de arena.
El actual regidor y también profesional del mar, José Marcote, explica como la acción humana también influye y, por ejemplo, la punta del muelle de Fisterra cambió las corrientes y en A Langosteira hay ahora una duna que antes de la obra no había.