Un paraíso avícola, milenario y único en Europa que merece ser potenciado
CARBALLO
Foro Voz Paisaxes Pondalianas | Expertos, empresarios y poetas destacan el valor del estuario del Anllóns
24 abr 2022 . Actualizado a las 20:40 h.Si el surrealismo de Dalí bebió directamente de la idílica Costa Brava, Eduardo Pondal hizo lo propio con el paisaje bergantiñán. Sobre las similitudes entre el pintor catalán y el bardo, sobre lo influenciados que están los artistas por su entorno y sobre otros muchos temas se habló ayer en Ponteceso durante un Foro Voz en el que especialistas y literatos departieron sobre la importancia económica, social y cultural de la ordenación del territorio.
Ante ellos, una sala llena de jóvenes alumnos del curso de monitor de tiempo libre que arrancaba justo ayer. El alcalde y presidente de la Fundación Eduardo Pondal, Lois García Carballido, dio la bienvenida a unos y otros «ao pinar espeso, á pequena Ponteceso». Habló Carballido sobre la obra de Pondal, «un dos grandes repositorios da reflexión sobre a paisaxe», y apeló a la rentabilidad económica como garante para la protección del entorno.
Tras él, Pedro Calaza, director de la Escola Galega da Paisaxe, pronunció una ponencia en la que puso el foco en la enorme variedad paisajística de Galicia [más de 28.000 catalogados] y en que es, junto con otras tres comunidades, de los pocos territorios que tienen una ley de protección propia. «Paisaje es mucho más que vegetación. Es flora, fauna, construcciones... Y no debemos olvidarnos del paisaje de las ciudades, en donde vive un 80 % de la población», dijo Calaza, antes de explicar el trabajo y los objetivos que persigue la fundación Juana de Vega, entidad de la que depende la Escola Galega da Paisaxe.
Citando el trabajo del geólogo y catedrático emérito Juan Ramón Vidal Romaní, explicó a los presentes que el Monte Branco es la duna rampante «más alta de Europa», algo que, a su parecer, debería ponerse en valor. «La duna de Pilat, la segunda de la lista, es de los lugares más visitados de Francia. Debemos lograr eso para el Monte Branco», dijo, potenciándolo como un recurso de gran valía.
Culminó su intervención aportando una serie de curiosidades sobre el Esteiro do Anllóns: tiene 7.000 años de antigüedad, es un paraíso de la fauna avícola, con 300 especies catalogadas; rachas de vientos de 120 y 140 kilómetros por hora dieron lugar a la duna del Monte Branco y está rodeado de microtopónimos cargados de leyendas y referencias poéticas, como el Pozo da Xerpa (sirena encantada mitad serpiente y mitad mujer).
Infraestructura verde y marismas
Uno de los términos en los que el director de la Escola Galega da Paisaxe más ahondó fue el de «infraestructura verde», que a priori, reconoció, podría sonar a oxímoron (dos términos contrapuestos), pero que a nivel de ordenación territorial tiene bastante sentido. Se concibe como «una red ecológicamente coherente y estratégicamente planificada de zonas naturales y seminaturales y de otros elementos ambientales, diseñada y gestionada para la conservación de los ecosistemas y el mantenimiento de los servicios que nos proveen». Así la describe el Ministerio de Transición Ecológica, que el año pasado sacó adelante su propia estrategia al respecto.
En colaboración con la Xunta, la Fundación Juana de Vega impulsó un proyecto piloto para definir la infraestructura verde del área de A Coruña: 140.000 hectáreas y muchos concellos implicados. Como curiosidad, mencionó que marismas como el Esteiro do Anllóns tienen una gran capacidad de captación de carbono. «Mucho más eficientes que los bosques», dijo.
Recorrido | Entre la costa sagrada de Pondal y un viaje por la naturaleza
A. L.
El mismísimo Eduardo Pondal, en la persona de Suso Martínez, recibió en lo alto del Monte Branco a los alumnos del curso de monitores de tiempo libre y paisajismo, al director del Instituto de Estudos do Territorio, Enrique Luis de Salvador Sánchez, y demás asistentes al foro. «Coñezo ben esta terra», proclamó el bardo en aquel «fanal inmenso do universo», en el Petón do Farol. También recordó a los gigantes sepultados en Dombate y otros dólmenes de la Costa da Morte. Suso Martínez recreó la figura del poeta de Ponteceso, que siempre quiso ser un bardo universal como los pinos emergidos del mar de Niñóns en «esta costa sagrada».
El foro de ayer también incluyó un paseo en barco eléctrico por el cauce del Anllóns. La empresa A-2velas mostró cómo es posible realizar una aventura náutica ecológica y sostenible. A bordo de la embarcación silenciosa Xouba, Francisco Brea, un monitor del curso de paisajismo y tiempo libre, fue explicando las especies que se podían ver desde el medio del cauce: «Abeneiros, freixos, carballos, salgueiros carrizos, lirios, tamargueiras». Al llegar a A Picota, dio vuelta y se veían las campanas de Anllóns.