Licitada la redacción para ampliar el polígono de Bértoa

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

ANA GARCIA

El plazo es de nueve meses, con un presupuesto de 78.650 euros. El alcalde de Carballo critica la demora

16 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) acaba de licitar la redacción del proyecto para ampliar el polígono industrial de Bértoa, en Carballo. Un contrato repartido en dos anualidades, que suma 78.650 euros, y que debería estar ejecutado en nueve meses. No obstante, en el propio pliego se admite que podría durar el doble, hasta 18 meses, por el tiempo de su preparación y por los trámites documentales. Con ese documento en la mano, la Xunta licitará después las obras, que se llevarán a cabo en dos áreas, diferenciadas colmatando las actuales primera y segunda fase, tanto por el lado Este (con el límite de la conexión de Bértoa con la autopista), como por el Oeste (con el límite de la propia autopista).

Es, por tanto, una ampliación muy peculiar, con dos trozos de terreno muy diferenciados, pero fáciles de tratar porque buena parte de los terrenos ya están adquiridos (expropiados) de cuando se realizó la ampliación de la que ya solo quedan cinco parcelas a la venta, más otras dos reservadas a equipamientos, y dos más cuyo uso se está variando para hacerlas más interesantes, pasando del uso terciario o de servicios, al mixto, que incluye el industrial, con mucha mejor salida en el mercado. Es la última fase de un proceso exitoso de venta que ha durado diez años, desde que se abrió el plazo para pedir licencia. Exitoso, eso sí, desde que el precio se rebajó al 50 %, una medida que ha dado un espectacular y muy rápido resultado.

La ampliación es algo que se viene demandando hace mucho, por la falta de espacio, y que concretó la conselleira de Medio Ambiente en una visita realizada a principios de mayo. Pero el alcalde carballés, Evencio Ferrero, cree que llega muy tarde. Recuerda que se trata de un documento refundido del 2014, o lo que es lo mismo, siete años esperando por un proyecto, «a saber o que hai que agardar pola obra», señala. Además, el hecho de que los nueve meses de plazo pueden convertirse en 18, como está previsto, retrasaría aún más una obra muy necesaria para Carballo.

Un parque de 1,8 millones de metros  

Con la futura ampliación, el polígono industrial de Bértoa tendrá 1,8 millones de metros cuadrados en total. «Palabras maiores», como apuntaban ayer desde la gerencia de la entidad, cuando ya ahora está entre los primeros de Galicia. La ampliación se hará en dos sectores diferenciados. El denominado A ocupará 443.226 metros cuadrados, de los que resultará una superficie neta de 230.454 metros.

Es la mayor, justo en la zona inferior a los campos de fútbol de As Eiroas, en línea recta (aproximada) hacia la autopista, y desde ahí hacia el norte todo ese tramo forestal, uniéndose con la actual ampliación. En ese espacio, por cierto, hay ahora dos viviendas. La otra parte de la ampliación, la denominada B, está justo al otro lado: todo el tramo situado desde la gasolinera de bajo coste hasta el límite con la actual ampliación, y a la derecha la carretera que conecta Bértoa y la rotonda del parque con la autovía. En este caso, se trata de un área de 110.781 metros, que se quedan en 59.089 metros netos. El resultado final es un polígono muy compacto, perfectamente delimitado por la autopista en 90 grados, y con accesos directos al norte y al sur. La conexión por el Oeste hacia el casco urbano, en la zona del Muíño da Pintura o carretera de Razo, está prevista.

En la visita de mayo de la conselleira, el arranque de la licitación de la redacción se esperaba para junio, pero se ha demorado cuatro meses. Para finales de este año estaba previsto iniciar los trámites expropiatorios de las fincas que quedaban, pero también habrá que esperar un poco más. Más o menos la mitad ya son del IGVS, lo cual acelerará los plazos.

De cara al fututo, al otro lado de la autopista aún queda mucho suelo que podría aprovecharse en una cuarta fase. Parece muy remota, como lo parecía la tercera, pero si el ritmo de ventas se mantuviese, en cinco años habría que estar con los trámites.