
A viva voz | «Hay niños que desde el vientre nos escuchan, y esa es la magia», dice desde Carballo, a donde ha llegado con el circo Inimitable. Es hijo del inolvidable Gaby, y sobrino de Fofó y Miliki, los eternos «payasos de la tele»
22 mar 2025 . Actualizado a las 00:13 h.Sonó ayer en Radio Voz la canción Había una vez un circo, desde luego más que apropiada para conversar con Gaby Aragón y para la venteada jornada que vivió la Costa da Morte. Sin temer jamás, ni al frío ni al calor, el circo daba siempre su función.... Comenzaron ayer en Carballo cuatro jornadas de ilusión: ha llegado a la localidad el gran Circo Inimitable y, con él, el también grande Gaby Aragón, hijo de Gaby Aragón y sobrino de los icónicos Miliki y Fofó. Seguirán las funciones hoy, mañana y el domingo:
—¡Bienvenidos!
—Voy a saludar como se merecen: ¿Cómo están ustedeeees?
—¡Bieeeeeeeen!
—¡Así se empieza, con energía!
—Recordábamos días atrás aquel disco «A mis niños de 30 años».
—Aquello fue maravilloso. Hoy esos niños ya tienen 50. El tiempo pasa, pero afortunadamente el legado de muchas de las canciones de Gaby, Fofó y Miliki permanece. Estoy asombrado, no solo de que no pasen de moda, sino de que mamás, papás y abuelos sigan pasándolas de generación en generación. Todos vienen a vernos, y hemos tenido hasta parejas de 20 o 25 años que también salen locos con el espectáculo, porque el menú es muy completo.
—Es un espectáculo homenaje a su padre, Gaby. Seguir haciendo circo puede que sea ya el tributo.
—Pues sí, porque la base inicial de Gaby, Fofó y Miliki, y anteriormente de mis tíos abuelos Pompoff y Thedy, ha sido el circo. El circo te hace y te da el contacto directo con el público. Sabemos que la televisión es un escaparate fabuloso, pero es más frío, por más que ellos, en el programa Los payasos de la tele, precisamente para conservar la esencia del circo, llevaban y metían en un plató hasta a 400 niños.
—Hablaba antes del menú del espectáculo. No estará usted solo, claro. Coreografías, acrobacias... ¿Qué es lo que traen a Carballo?
—Tenemos desde una bailaora con hula hoops maravillosa hasta unos patinadores estupendos. O un chico que hace unos equilibrios impresionantes sobre una barra de pool dance, muy original y elegante. Otro cómico maravilloso, que es gallego por cierto... No puedo desvelarlo todo, pero sí puedo decir que la gente está saliendo muy contenta de vernos, convencidos de que ha valido la pena pagar la entrada, y además llega de muy diferentes países. Viene gente de todos lados, Francia, Italia, Reino Unido...
—Entendemos que su labor es conducir un poco todo esto.
—Sí. Básicamente lo que hago yo ahora es tirar del recuerdo mediante las canciones. Don Pepito, El auto nuevo o ese Feliz en tu día compuesto por mi tío Miliki.
—Muy recientemente se han cumplido ya 50 años del estreno de «Los payasos de la tele» en TVE. Medio siglo de un plumazo. ¿Cómo se explica que canciones que encandilaron a otras generaciones sigan haciéndolo hoy?
—Se ha medio estudiado el tema. Hay mamás que desde que llevan el nene en el vientre ya le van cantando lo de Vamos de paseo... O Don Pepito... Desde el vientre escuchan nuestras canciones, y esa es la magia para que no se pierda. Y cada vez que en un estadio se escucha eso de Hola fondo norte, Hola fondo sur...

—¿Y qué magia tiene el circo para que le pase justo lo mismo?
—El circo es un espectáculo único. Hay gente que con 40-50 años me dice que es la primera vez que va, y yo recomendaría hacerlo desde más joven. El circo es un espectáculo en vivo, todo lo que sucede en el escenario es real, existe el peligro, la emoción que nos empapa a todos, y luego yo pues con mi voz prodigiosa que ahí estoy para cantar... [ríe].
—¿Formar parte de una familia circense como fue siempre la suya es un aval o un listón alto?
—El listón está muy alto. Cada tarde que salgo al escenario me invade esa responsabilidad. Está bien que el público te tenga cariño y el legado es importante, pero tú tienes que cumplir y demostrar que uno no está viviendo de lo que fueron su papá y sus tíos. También canto canciones nuevas, otras que teníamos con mis hermanos en Los Gabytos... Has de demostrar que estás ahí por ti, que la generación sigue funcionando porque algo haré bien [ríe]. Invito a venir a familias completas, es uno de los pocos espectáculos que pueden compartir todas las generaciones, y que tras salir de él, cenando o en casa, siguen comentando.
—Pasaron en Navidad por Vigo. Tras Carballo irán a A Laracha, Betanzos, Ferrol... Les quieren.
—Galicia, bendita tierra. No niego que me pongo morado a comer cuando vengo [ríe]. Disfruto de las playas, de los paseos, la gente... ¿Cómo resistirse a hacer una gira por Galicia? Es una tierra especial, dicen que tierra de meigas.
Horarios y entradas
El circo está situado en el aparcamiento de la calle Carlos Casares. Hoy, sesión a las 18.30 horas. Mañana, a las 17.00 y 19.30. El domingo, a las 12.00 y 17.00. Entradas anticipadas en ticketrona.es o en la propia taquilla del circo desde una hora antes.