El Barça doblegó al Patín Cerceda con ayuda arbitral

José Manuel Ferreiro Negreira
José M. Ferreiro CARBALLO / LA VOZ

CERCEDA

José Manuel Casal

Hockey sobre patines: los aficionados abuchearon a la pareja de colegiados

25 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El líder, el Barcelona, goleó ayer al Patín Cerceda (3-7) en partido correspondiente a la OK Liga. El choque estuvo marcado por la actuación de los colegiados, verdaderos protagonistas. Los azulgranas no necesitaban de ayuda extra para llevarse los tres puntos, pero los árbitros fueron claves para encarrilar el partido.

Patín Cerceda: Willy; Grasas, Fariza, Martín Payero, Gonzalo -equipo inicial- Mantiñán, Pablo Togores y Pablo Fernández.

Barcelona: Sergio Fernández; Marc Gual, Matías Pascual, Raúl Marín, Sergio Panadero -inicial- Xavier Barroso, Reinaldo García y Marc Torra.

Árbitros: Germán Sandoval (Madrid) y Miguel Díaz (Asturias). Muy mal.

Goles: 0-1, Raúl Marín; 0-2, Matías Pascual; 0-3, Reinaldo García (descanso); 0-4, Reinaldo García; 0-5, Marc Torra, de penalti; 0-6, Marc Torra; 1-6, Mantiñán; 2-6, Martín Payero; 3-6, Martín Payero, de falta; 3-7, Marc Torra, de falta.

Incidencias: Excelente entrada en el pabellón González Laxe, con 350 espectadores. Hubo minuto de silencio por los fallecidos en el accidente aéreo.

El partido no pudo comenzar peor para los locales. El primer lanzamiento, desde el medio del campo, cuando apenas se cumplía el primer minuto, supuso el 0-1. Tampoco tuvo su día Martín Payero. El Barcelona exhibió su clase, pero la fortuna se alió en el tercer gol. Antes, Matías Pascual agredió a Mantiñán y los colegiados pasaron por alto este hecho, que suponía además la expulsión del jugador catalán, que rápidamente fue sustituido. Ese roce se produjo en la recta final de la primera parte con 0-2. Fariza, Grasas o Martín Payero lo intentaron, pero no fueron capaces de batir a Sergio Fernández.

En la segunda parte, el conjunto catalán encarriló el partido hasta el 0-6 y fue cuando se produjo la reacción local, apoyada desde la grada por los aficionados. El marcador se ponía 3-6 y Mantiñán lanzó al travesaño y seguidamente Martín Payero no transformó otra oportunidad. Fueron los minutos mágicos que no pudieron rubricar los cercedenses, aunque nunca perdieron la fe en la remontada.