La gastronomía es otro de los puntales de la comarca
06 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Con las debidas precauciones en caso de lluvia o viento, la Costa da Morte tiene muchos recursos turísticos al aire libre. Su propio paisaje, desde el imponente Vilán, hasta Fisterra, por más que el faro de esta última localidad esté cerrado, merecen una visita, al igual que la costa carballesa, la playa de Caión con su sendero azul, el paseo del Anllóns por Ponteceso, el área de Gabenlle larachesa, el casco histórico de Corcubión, el santuario pétreo de Muxía y todo el entorno del templo de la Virxe da Barca, por citar algunos puntos. El castro A Cidá de Borneiro, la cascada de O Ézaro (Dumbría), el faro cormelán de O Roncudo, la propia villa de Camelle y Camariñas, Malpica, el faro de Punta Nariga, Cee... Son lugares en los que se palpa la esencia de la Costa da Morte y que están abiertos todo el año, 24 horas, caiga o no en festivo. Al margen de esto, está asimismo la buena gastronomía.