«Recibimos este premio en un año muy especial, en nuestro 50.º aniversario»
PONTECESO
El presidente de la Fundación Barrié define como «ejemplar» el trabajo desde O Couto
12 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El domingo será un día especial en O Couto. Empieza una nueva edición de las Festiletras y lo hará, además, con el acto de entrega de los Premios Bos e Xenerosos, un galardón con el que la Fundación Eduardo Pondal reconoce el trabajo de personas e instituciones en favor de la cultura y la identidad gallega, así como su difusión y apoyo. Entre los premiados de este año se encuentra la Fundación Barrié. Su presidente, José María Arias Mosquera (Santiago, 1953), valora lo que implica para la entidad recibir un reconocimiento de este tipo, que llega además en un tiempo de efeméride para ellos. Junto a la Fundación Barrié, también recibirán el premio Concha Blanco, Ramón Villares, Marcos Pereiro y Xosé Touriñán y Uxía Senlle, viejos amigos y colaboradores de O Couto que se suman a un ya amplio elenco desde que empezaron a entregarse. Hace más de dos decenios, la Fundación Barrié apoyó el primer Simposio Pondaliano. Desde entonces, la relación no se extinguió.
-¿Qué supone para la Fundación Barrié que usted preside recibir este premio Bo e Xeneroso?
-Recibimos este premio con gran agradecimiento y satisfacción en reconocimiento a nuestra labor. Lo entendemos como una reafirmación de que vamos por buen camino y que nuestros esfuerzos por contribuir al desarrollo de Galicia son acertados. Recibimos este premio, además, en un año muy especial ya que celebramos nuestro cincuenta aniversario.
-¿Implica más responsabilidad, un esfuerzo aún mayor con la sociedad? ¿Es también el reconocimiento a un trabajo constante?
-El reconocimiento a nuestro esfuerzo es muy importante, pero la responsabilidad y el esfuerzo son premisas que ya conviven en lo más alto de la lista en nuestro día a día con otras como la excelencia, la innovación o, asimismo, el compromiso.
-Desde la Fundación indican que desde el primer momento, ya para el primer Simposio Pondaliano, la Fundación Barrié prestó su apoyo, confió en ellos. ¿Por qué fue así? ¿Qué vieron en la Fundación Pondal para decidir brindarle su colaboración?
-Efectivamente, la Fundación Barrié apoyó los simposios pondalianos desde 1995, cuando fueron organizados por la Asociación Monte Branco, entidad que, más adelante y junto al Concello de Ponteceso, crearía la Fundación Eduardo Pondal. Los simposios pondalianos reunían ya entonces a reputados investigadores e intelectuales del ámbito de la cultura y de la educación, dos áreas que ocupan un lugar destacado en la estrategia de la Fundación Barrié. Pero esto no es una excepción, apoyamos a otras muchas instituciones en Galicia como el Museo do Pobo Galego; la Real Academia Galega; la Real Academia Gallega de Bellas Artes; el Instituto da Lingua Galega o la Real Sociedad Amigos del País de Santiago, por mencionar solamente algunas.
-¿Cómo valoran desde la Barrié el trabajo que se hace desde la Fundación Pondal, desde la pequeña aldea de O Couto?
-El trabajo de la Fundación Pondal es ejemplar y muestra que lo que importa es la labor, no el lugar desde el que se trabaja.
-¿Qué retos afronta ahora la Fundación Barrié? ¿En qué momento se encuentra?
-Nuestro reto siempre es, y ha sido, estar un paso por delante de las necesidades de la sociedad y en ello trabajamos desarrollando destacados proyectos en los ámbitos de la educación, cultura, ciencia y acción social.