
Todas son fundaciones de autor y gallegas, pero no fue fácil encontrar puntos de encuentro más allá de estar dedicadas a un escritor. En Ponteceso, en la sede de la centrada en Eduardo Pondal, se reunieron representantes de entidades que tienen como objetivo mantener la obra y la memoria de Uxío Novoneyra, Valle Inclán, Curros Enríquez, Blanco Amor, Casares, Cela o el cineasta Carlos Velo, entre otros.
Cada uno de los representantes habló sobre la forma de funcionamiento y las expectativas de cada colectivo y ahí se vieron las diferencias, porque mientras unas apenas tienen actividad otras, como la de Pondal, muestran una pujanza que hace pensar en su mantenimiento, sobre todo por la incorporación de personas jóvenes como Tamara Lema y el trabajo que se realiza en la cantera.
En lo que sí estuvieron todos de acuerdo fue en las dificultades económicas por las que pasan y la posibilidad de conseguir fondos europeos. Solo acudieron una parte de las entidades de este tipo, ya que en Galicia hay 90, según dijo el secretario xeral de Cultura, que también es miembro de la Fundación Cela. De todo este colectivo están en funcionamiento una tercera parte y esas 30 entidades es a las que se quiere reunir en próximas citas, probablemente en el Pazo de Trasalba, cuyo mantenimiento preocupa a la Fundación Otero Pedrayo.
Además, el encuentro dio pie a la posibilidad de planes conjuntos entre dos entidades. El hijo de Uxío Novoneyra aprovechó la estancia para fotografiarse junto a una imagen de su padre tomada en O Couto hace 21 años. También planteó la posibilidad de intercambios entre niños de las dos fundaciones, para que los de la costa vayan a O Courel y los de la montaña a Ponteceso. La idea fue bien recibida y saldrá adelante. Además, se abordó la posibilidad de intercambio de material y actuar de forma coordinada.