La Ponferradina, pendiente de enmendar una mediocre segunda vuelta

Emilio Rosanes

CDLUGO

Óscar Cela

El rival del Lugo este domingo ha sumado solo 10 puntos de los últimos 24 en juego

16 mar 2024 . Actualizado a las 04:14 h.

Si hay alguna entidad en el fútbol español que represente el alma gemela del Club Deportivo Lugo, no puede ser otra que la Ponferradina. Dos almas gemelas que, de la mano, vivieron la felicidad del ascenso a Segunda División en el año 2012, la adversidad del descenso la temporada pasada y que rara vez dejan de acudir a su amistosa cita veraniega. Los de Íñigo Vélez llegan al encuentro dispuestos a corregir una errática segunda vuelta que los ha alejado del liderato de la competición. Un único punto en las dos últimas jornadas, 10 en las ocho jornadas transcurridas de la segunda vuelta y una cifra escasa de 29 goles en 27 jornadas de campeonato, no parecen garantizar un óptimo momento de juego. Otra edición del derbi de Os Ancares está servida (este domingo, 19.00 horas, El Toralín, TVG 2).

Discutido bagaje goleador

Quizás la poca pegada de la Ponferradina obedezca a la acumulación de jugadores por detrás del balón o a esa premisa esgrimida por el técnico de priorizar rendimiento a una confianza especialmente necesaria en los responsables de la faceta goleadora, que debieran recibir el mayor apoyo cuando menos lo merecen. El alejamiento de la titularidad del máximo goleador del equipo, Yuri de Souza, el ostracismo impuesto a Álvaro Vázquez, determinante en clubes de superior categoría y que acumula cuatro goles en los seis encuentros disputados con el Linares tras su reciente salida del cuadro berciano, podrían evidenciar un déficit de confianza en los delanteros que Mendilíbar no evidenció al frente del Aurrerá cuando Íñigo Vélez tenía 19 años.

Refuerzos de invierno

La Ponferradina ha hecho uso del mercado invernal para potenciar la competitividad del plantel. El central David Andújar, procedente del fútbol chino, el berciano Borja Valle, repatriado desde la liga rumana, y la llegada de Samuele Longo desde el fútbol griego, debieran aportar un diferencial de calidad en las filas de los blanquiazules en el tramo decisivo de temporada.

Dibujo táctico

El técnico vasco, fiel al sistema de juego 1-4-2-3-1, ha modificado el mismo en la última jornada —a domicilio frente al Celta Fortuna— a un 1-5-4-1, desapareciendo del once titular Nil Jiménez y James Igbekeme, tras la derrota cosechada en el feudo del Fuenlabrada la semana anterior. Con las posibles ausencias de Josep Cerdá y Raúl Dacosta, ambos determinantes y en excelente estado de forma hasta sus respectivas lesiones, en el once de Íñigo Vélez parecen seguros, salvo contingencia de última hora, Andrés Prieto en portería, Thomas Carrique y Javi Lancho en los laterales, Antonio Leal y David Andújar como centrales, con la posible inclusión del recuperado Kevin Sibille en caso de apostar por una terna en esta posición, y con Markel Lozano acompañado de Pablo Clavería o Igbekeme en la sala de máquinas, con Borja Valle, Ernesto Gómez y Andoni López como interior o carrilero y Samuele Longo, como referencia ofensiva.

El juego directo como principal recurso

Los bercianos muestran un estilo de juego directo, con escaso protagonismo de sus mediocentros en la fase de elaboración, tratando de elaborar su juego ofensivo a partir de los duelos ganados en terreno adversario ante balones aéreos. Una vez ganada la posesión, utilizan tanto los canales interiores para ganar la espalda de adversarios, como los exteriores para finalizar con pases al área donde hacen lucir un brillante juego aéreo ofensivo. Determinantes, asimismo, Dacosta y Cerdá en los duelos individuales con el balón a ras de césped, ausencias determinantes para los bercianos en las últimas jornadas.

Táctica defensiva

En fase defensiva, se detecta un posicionamiento del equipo con las líneas muy juntas, bastante más retrasado que en la primera fase del campeonato, acumulando jugadores en la solidaria presión que realizan en propio campo.

Contraste en la estrategia

La brillantez mostrada en las acciones de estrategia a nivel ofensivo no tienen su continuidad en su propia área, donde la falta de contundencia en duelos individuales y la deficiente toma de decisión en el seguimiento de marcajes constituyen un lastre que, con la incorporación de David Andújar, ha sido parcialmente corregido.

Dos concepciones de fútbol distintas, pero acompañadas de los mismos puntos débiles en la dificultad para finalizar ocasiones y en la implicación de una mayor contundencia defensiva cuando las circunstancias del juego lo exigen.