Astilleros José Valiña bota hoy un petrolero que comenzó a construir en el 2008 y que «inaugura» sus nuevas instalaciones
26 mar 2010 . Actualizado a las 12:19 h.El buque petrolero Monte Anaga será botado hoy y su singularidad viene dada porque es la primera embarcación que se realiza en la ciudad desde octubre del 2005, cuando desde Astilleros José Valiña se entregó el pesquero França Monte, y también es la primera construcción desde que esta firma trasladó su sede al polígono de la Grela, en donde ha instalado los talleres de mecanizado y calderería. En los próximos días, el barco se trasladará de la dársena de Oza, donde la empresa cuenta con una concesión de 21.900 metros cuadrados, al muelle del Este para realizar las pruebas de estabilidad, así como los remates finales de construcción.
Este petrolero, que es el proyecto número 220 de la única empresa en la ciudad dedicada a la construcción naval, ha sido un encargo de la empresa madrileña Ondimar Transportes Marítimos y en sus diez tanques de carga, con capacidad para 4.200 metros cúbicos, transportará hidrocarburos para la empresa Campsa.
Desde la firma constructora se destaca que el barco ha sido diseñado y su estructura reforzada para transportar y suministrar combustible marino con punto de inflamación por encima de 60°, siendo capaz de transportar y suministrar a la vez cuatro productos de diferentes tipos de fueloil y dos productos distintos de gasoil marino. El Monte Anaga es una embarcación de 87,16 metros de eslora, de doble casco y doble fondo, que ha permitido ampliar temporalmente la plantilla de esta empresa familiar, de los 40 trabajadores, a 110, además de contar con 30 trabajadores desplazados de otra empresa, ya que se asegura que en estos momentos es difícil conseguir profesionales para el sector.
Consuelo Valiña, apoderada, junto a su hermana, de la empresa que fundó su padre hace 58 años, asegura que las exigencias y especificidades de este petrolero supuso que se contase con «profesionales de primera categoría», ya que está equipado con los más modernos sistemas de telecomunicaciones y navegación disponibles actualmente, y recuerda que su construcción fue supervisada por la sociedad de clasificación Bureau Veritas.
Pioneros
El director de estos astilleros, Fernando Alcalde, recuerda que la empresa tiene experiencia en este tipo de construcciones, ya que los primeros barcos tipo búnker de suministro de combustible se construyeron en Valiña en la década de los ochenta, aunque reconoce que accidentes como el Erika, el Mar Egeo o el Prestige han hecho que los requisitos hayan aumentado considerablemente.
Astilleros José Valiña tramita ahora un buque gemelo al que se bota hoy, para la misma compañía, cuya construcción se demoró por causas atribuibles a la crisis económica, pero no son los únicos encargos que se realizan en esta empresa coruñesa, ya que además de la construcción de buques de acero -en el que cuentan como hito el ser los creadores del prototipo de buque rampero más adecuado para la pesca en el Gran Sol-, trabajan en grandes reparaciones, alargamientos y en la fabricación de maquinaria.
«Nunca estamos inactivos, ahora tenemos una pontona en reparación y vamos a varar unas lanchas de la Armada», explica Consuelo Valiña, que reconoce que pese a la espectacularidad que supone el encargo de una nueva construcción, la rentabilidad económica está en el campo de la reparación.