El próximo mes de diciembre se cumplirán ocho años desde que José María Barja tomó las riendas de la Universidade da Coruña, con un equipo en el que una de sus bazas más fuertes, o por lo menos más visibles, era el vicerrectorado de Infraestruturas e Xestión Ambiental capitaneado por Xosé Lois Martínez. Poder incrementar las infraestructuras de la UDC, una reclamación histórica, era uno de los principales objetivos del equipo de gobierno, que no ha parado de repetir a lo largo de los dos mandatos.
¿Por qué necesita más espacio la UDC?
La puesta en marcha de la Universidade da Coruña hace más de dos décadas vino acompañada de la aprobación de un plan parcial del PGOM en 1990, en el que se contemplaba la expropiación de 23 parcelas para dotar a la institución académica del espacio necesario para acoger a alrededor de 25.000 estudiantes que en la actualidad están matriculados en la UDC. Sin embargo, el planeamiento nunca se llevó a cabo, y solo se compraron 9 terrenos, que fueron donde se ubicaron las facultades de Elviña y la Zapateira. Pero el gran crecimiento de la Universidade da Coruña en los últimos años hizo necesario que se tomaran nuevas medidas para poder albergar a nuevos servicios y estudiantes. Ante la falta de movimiento por parte de la Xunta y del Ayuntamiento para dotar de más suelo edificable a la UDC, el vicerrectorado de Infraestruturas propuso una modificación en el PGOM para poder construir dentro del propio campus ya existente, sugerencia que fue recogida por Joan Busquets.
¿Cómo surgió la polémica?
La semana pasada Xosé Lois Martínez recepcionaba el nuevo edificio anexo de Informática y Camiños, cuyo objetivo era dotar de más aulas y despachos a ambas facultades, que en un principio se pensaron para 1.000 alumnos, pero entre las dos ya suman más de 3.000 en la actualidad. En la presentación del inmueble el vicerrector de Infraestruturas explicaba entonces que la obra se hizo sin licencia, porque todavía no está aprobado el PGOM donde se contempla la construcción del inmueble.
¿Qué consecuencias han traído estas declaraciones?
Desde el Ayuntamiento, Carlos Negreira anunció que abrirá un expediente a la UDC si realmente se comprueba que se levantó el edificio sin el correspondiente permiso. Por parte del Rectorado, el consejo de dirección ha decidido por unanimidad cesar a Xosé Lois Martínez.
¿Esta polémica marcará la elección del nuevo rector?
La celebración de las elecciones a rector está a la vuelta de la esquina y este escándalo ha venido a empañar los ocho años de mandato de José María Barja. El candidato a sustituirle por Nova Luce y actual vicerrector de Profesorado, Xosé Luis Armesto, puede verse salpicado por toda esta problemática, que no le beneficiará en nada. De hecho, sus oponentes ya han tomado nota de ella y pueden utilizarla como arma política en los comicios de diciembre.