Aparece en Sada un niño perdido en O Seixo Branco

E. E. OLEIROS / LA VOZ

A CORUÑA

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La desaparición del menor movilizó a los servicios de emergencias que los buscaron durante varias horas

04 mar 2013 . Actualizado a las 15:11 h.

Suceso con final feliz ayer en Oleiros. Hacia las cuatro de la tarde los servicios de emergencias recibieron la llamada de una familia que buscaba a su hijo, un niño de once años que se había perdido en una zona complicada, el entorno de los acantilados de O Seixo Branco.

El joven se encontraba poco antes con un grupo de amigos jugando en la zona, al parecer quiso regresar antes que ellos a la casa en la que se encontraba pasando el día su familia y se perdió. Los intentos por localizarlo fueron vanos y sus padres llamaron a emergencias.

En poco tiempo se montó un dispositivo formado por miembros del servicio municipal de emergencias, voluntarios de la zona, amigos y patrullas de la Guardia Civil, que empezaron a peinar las pistas cercanas a los acantilados de O Seixo Branco y que hasta llegaron a mirar entre las rocas temiéndose lo peor.

La mayor preocupación de quienes organizaban la búsqueda, una vez comprobado que no había caído al mar, fue la de tratar de localizarlo antes de que cayera la noche, porque entonces las cosas se le podían complicar bastante más al menor si no conocía la zona.

Finalmente las cosas acabaron bien ayer en Oleiros. No fueron los servicios de emergencias los que dieron con él, sino al revés.

El niño de once años se puso a caminar por las pistas de Dexo y acabó llegando no al mar, sino que pasó Lorbé y se acercó a Sada, a varios kilómetros del lugar en el que había sido visto por última vez con sus amigos.

Fue él mismo quien paró a una patrulla de la Guardia Civil que pasaba por la localidad para comunicarles que se había perdido. Los agentes, conocedores del dispositivo en marcha, avisaron a los compañeros del feliz hallazgo. La familia que se encontraba en la costa de Dexo buscando al menor se desplazó hasta Mera, donde se vivieron momentos muy emotivos durante el reencuentro. El suceso se quedó en un susto, ya que el menor regresó ileso.