Cortés y Buendía reúnen de nuevo en Maristas a una generación que destacó en la base
31 ago 2016 . Actualizado a las 11:45 h.Diez años han pasado desde que Fernando Buendía y Carlos Cortés dejaron de entrenar juntos. Ambos eran árbitros de baloncesto, coincidían en los entrenamientos e incluso realizaban cursos juntos. Tal fue la unión, y compenetración que hubo entre ellos que decidieron hacerse cargo de un equipo y entrenarlo entre los dos: el Calasancias femenino. Llegaron incluso a entrenar a la selección gallega femenina, pero con el paso del tiempo cada uno siguió su camino y este año, tras diez temporadas, se vuelven a juntar para llevar adelante un proyecto ilusionante en el Club Maristas femenino: el ascenso a la Liga 2.
Carlos Cortés es el mejor colegiado de baloncesto de la historia de Galicia, arbitra encuentros de Euroliga y de ACB. Por el contrario Fernando Buendía tomó un camino diferente y se centró en formar jugadoras en las categorías base del Basquet Coruña, que es uno de los equipos que más cantera forma en toda España.
Entre ambos se encargaran de dirigir al equipo femenino de Maristas. Fernando será el primer entrenador, y Carlos, como por tiene que viajar a menudo i, se encargará de la preparación física del equipo. «Carlos estará muchas veces fuera y no podrá ayudarme siempre, pero va a ser un colaborador del equipo. Es una persona muy trabajadora y meticulosa, tengo mucha confianza en él», comenta Buendía.
El reencuentro de los entrenadores no es el único que se producirá en las filas del Maristas femenino. Eugenia, Marina, Gema, Tati y Mara, volverán a ser compañeras de equipo una década después. Así mismo volverán a encontrarse con Carlos y Fernando, los cuales las entrenaron cuando jugaban en categorías inferiores.
Un bonito proyecto que surgió después de que el antiguo entrenador de Maristas se marchase. «Cuando Román (ahora delegado en el Clavijo) se fue hacía falta un sustituto y se dio la casualidad y la oportunidad de que Fernando entrenase al equipo», afirma Carlos Cortés. «Un cúmulo de circunstancias hizo que nos juntáramos, y aquí estamos diez años después», comenta Fernando Buendía.
Todos están ilusionados con el proyecto y aseguran que el haber trabajado juntos, tanto entrenadores como jugadoras, será muy positivo para el equipo. «La base nunca se olvida así que ya tenemos terreno ganado», señala Cortés. «Nos fue bien hace años, tenemos muy buen recuerdo», comenta Buendía. «Va a ser un reencuentro muy bonito. Entre los entrenadores se conocen y nosotras estamos encantadas con ellos», dice Eugenia, una de las jugadoras del equipo.
La fuerza del grupo
El principal objetivo de este reencuentro tras una década es mejorar las estadísticas del año pasado y ascender a Liga 2. «Intentaremos dar el salto y conseguir llevar a un equipo coruñés a una categoría de nivel nacional», señala Marina, otra de las jugadoras del club.
Desde Maristas aseguran que el cóctel de entrenadores y jugadoras será explosivo, y que llegarán a lo más alto. «Las chicas tienen muchas similitudes y estoy seguro de que formarán un bloque fantástico que las elevará a lo más alto», afirma Buendía.