
El puerto lleva casi siete años a la espera de una conexión ferroviaria que sigue sin fecha
03 abr 2019 . Actualizado a las 11:29 h.A Coruña tiene un puerto interior y una estación ferroviaria que le da servicio, la de San Diego. Ahora también tiene otro puerto, en Langosteira, que acabará llevándose el grueso de la actividad industrial de los muelles interiores, pero que a diferencia del otro, no tiene tren. No es un detalle menor, porque sin ferrocarril no habrá mudanza de los principales operadores que descargan graneles, que seguirán el centro y, por consiguiente, ocupando unas superficies que no se podrán integrar en la ciudad para nuevos usos. El problema de Langosteira es, ahora mismo, el de un coche de altas prestaciones que circula por corredoiras: no tiene forma de desarrollar todo su potencial. Al mismo tiempo, la ciudad tiene en el aire el futuro de la estación de mercancías. El tren al puerto llegar tarde, pero al menos hay plan. Para sustituir San Diego, por ahora, no lo hay. ¿Qué está ocurriendo con el transporte de mercancías por ferrocarril en A Coruña?
En paralelo
El puerto y las vías, a la vez. Cuando se concibió Langosteira se pensó con un tren. Aquella gran obra nacida a la sombra de la catástrofe del Prestige se iba a desarrollar en paralelo a la de su conexión ferroviaria. En el año 2007 ya se concebía que cuando los nuevos muelles estuvieran terminados en el año 2012 el tren podrían llegar a ellos. Lo que ocurrió en el 2012 fue que, en septiembre, entró en Langosteira el primera barco y el puerto empezó a funcionar. Pero del tren nada se sabía entonces. Ni llegó ni estaba previsto que lo hiciera.
El proyecto
A cargo de la Autoridad Portuaria. No es que no hubiera tren, es que ni siguiera se había encargado entonces el proyecto. Con los ritmos que manejan las Administraciones la Autoridad Portuaria decidió licitar y contratar por su cuenta ese proyecto. Lo hizo en el año 2016 y los planos se dibujaron siguiendo las indicaciones dadas por el ADIF. En abril del 2018 la Autoridad Portuaria se lo entregó, completamente finalizado, a Puertos del Estado.
Dudas
¿Existe o no existe? Sobre el proyecto del tren se sembraron dudas tras el cambio de Gobierno en Madrid. Los socialistas entraron en Fomento con afirmaciones contradictorias. El delegado del Gobierno, Javier Losada, llegó a decir que para ese tren no existía proyecto. Hace unos días la presidenta del ADIF, Isabel Pardo de Vera, apuntó que estaba todavía en fase de redacción, cuando llevaba un año terminado. Existir, existe, pero no se sabe si alguien está trabajando sobre él.
El puerto exterior
Doce empresas. La necesidad del tren es algo real, porque el puerto exterior funciona y su actividad sigue en aumento. Allí hay actualmente doce concesiones operando, con Repsol construyendo ya su pantalán y la firma Oil Deposit Corunna tramitando la suya para poder empezar con las obras. Aunque el tren no es necesario, en principio, para los graneles líquidos, sí lo es para los sólidos. Parte de los cereales se descargan ya en Langosteira -y dejan de molestar a los vecinos de Os Castros- pero no se irán del todo mientras no tengan tren, que facilitaría también la llegada de nuevas empresas.
Los fondos
¿Quién pagará esa obra? Como en todas las grandes infraestructuras en el tren a Langosteira lo que hace falta es dinero para pagarlo. De dónde sacar los 140 millones de euros es un asunto complejo. En abril del 2018 Xunta y Fomento firmaron un acuerdo comprometiéndose a financiar esa obra a medias entre el ADIF y Puertos del Estado, tendría que licitarse en el primer semestre de este año. Aquel protocolo se convirtió en papel mojado tras la llegada del PSOE a Madrid, porque antes de la moción de censura a Rajoy no se concretó su contenido ni se le asignó presupuestos. Los de Sánchez, después, tampoco lo hicieron.
Planos pendientes
Uxes y más vías. El problema no solo está en encontrar la financiación, sino en tener todos los papeles y trámites previos para poder empezar. El ADIF descubrió hace dos semanas que faltan cosas. Sí habría una línea hasta Vío que permitiría enlazar con la red ferroviaria hacia A Coruña y salir de allí en dirección a Lugo, pero faltan otros cuatro kilómetros de trazado ferroviario desde Vío hasta Uxes, así como cambios en esta última estación, para permitir enlazar ese tren con el eje Atlántico en dirección a Santiago y al resto de España. Para esa segunda parte no hay ni estudio informativo ni proyecto.
Opciones
Licitación inmediata. Hacer ese nuevo estudio con los planos correspondientes puede sumar más años de retrasos, por eso la Autoridad Portuaria propone partir por fases la obra. Para la primera de ellas, la conexión con A Coruña, bastaría con lo que hay proyectado y se podría licitar ya. Es la que más urge porque facilitaría sacar de los muelles interiores el bioetanol y los cereales, que usaría esa línea. La de Santiago, que antes iba a dar salida al carbón hacia Meirama, urge menos porque la central eléctrica cerrará el año que viene y desaparecerán esos tráficos.