Los percebeiros solo recogen el tope en dos de las seis áreas extractivas

Elena Silveira
Elena Silveira OLEIROS

A CORUÑA

FUCO REI

Denuncian que los furtivos esquilman las rocas «como si fueran rebarbadoras»

25 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La agrupación de percebeiros de la cofradía coruñesa ha lanzado la voz de alerta sobre el estado en el que se encuentras las seis zonas extractivas en las que faenan. Aseguran que solo pueden llegar al tope de capturas en dos de ellas; en el resto es imposible ya que las rocas están esquilmadas. «Los furtivos actúan en ellas como máquinas rebarbadoras. Se llevan todo: pequeños, grandes o medianos, les da igual. No escogen el percebe y tampoco dan posibilidad a que se regenere», explican. Así, en este momento, los 40 trabajadores que forman parte de la agrupación de percebeiros llegan a los 7 kilos por persona y día permitidos en las rocas de la Torre y en el espigón de Langosteira. «Las otras cuatro (Ares, Mera, O Portiño y Suevos) están totalmente esquilmadas. De hecho, a O Portiño ya ni vamos porque no hay nada», denuncian. Puntualizan que son zonas con veda y que, por este motivo, tienen más producción. «Cada 15 días se abren dos días en la Torre tierra. Y en Torre islas abrimos tres días en julio, cuatro días en agosto, otros cuatro días en septiembre y, después, cerramos hasta Navidad, cuando trabajamos una semana en las islas para después cerrar hasta el verano», aclaran.

Impunidad de los ilegales

Los percebeiros confirman que el problema del furtivismo «cada vez va a más», tanto por la situación económica de algunas familias como por la impunidad con la que pueden actuar. «Y si no hay más ilegales es porque estamos vigilando las zonas», indican. Recuerdan que la semana pasada se identificó y detuvo al mismo grupo de furtivos durante cuatro días consecutivos. «Ello da idea de lo que está pasando en nuestras costas», aseguran. En este sentido, confirman que durante el día hay vigilantes guardapescas y, por las noches, son los propios percebeiros los que se organizan para custodiar los bancos marisqueros. «Y nadie puede fallar en la guardia porque si no sería un desastre», dicen. Reclaman más colaboración de las diferentes Administraciones y también que se aplique la ley con más contundencia: «No queremos que la gente vaya a la cárcel, ese no es nuestro objetivo, pero está claro que las multas no sirven para nada porque se declaran insolventes y al final no pagan. A los reincidentes habría que imponerles trabajos sociales, órdenes de alejamiento e incautarles el material», comentan los percebeiros. Añaden que las medidas para erradicar el furtivismo deberían ir también dirigidas con más insistencia hacia los locales de hostelería que compran las capturas ilegales. «Sabemos que algunos lo hacen sin factura. Y esos nos hacen un flaco favor a todos, porque contribuyen a que el problema persista», se quejan desde la agrupación coruñesa.

Recuperación de Mera

Los percebeiros explican que en los próximos meses harán un esfuerzo para intentar recuperar los bancos de percebes de la zona de Mera. Con la colaboración de la Guardia Civil y la contratación de un vigilante fijo esperan que en un año, aproximadamente, puedan llegar al tope de capturas. «Es una zona que, si la cuidamos, tiene muchas posibilidades. Ahora mismo, con tres horas de faena un percebeiro puede alcanzar la mitad de los kilos permitidos. La regeneración no solo va a depender de que no haya furtivos, ya que también inciden el tiempo, las mareas, si hay lluvia y temporal... Pero vamos a intentarlo», anunciaron. También esperan obtener en breve la autorización administrativa para la séptima zona extractiva en las rocas de Langosteira.

Una fiesta gastronómica en el entorno de la Torre que se quedó sin concretar

Los percebeiros de la cofradía coruñesa plantearon a finales del año pasado al gobierno local la posibilidad de celebrar en el entorno de la torre de Hércules la primera edición de una fiesta del percebe en la ciudad. La idea del colectivo era organizar este verano la degustación gastronómica en las explanadas de la zona, coincidiendo con los actos de aniversario de la declaración del faro romano como patrimonio de la humanidad. «Los primeros contactos con el gobierno anterior los tuvimos en el mes de octubre pasado. Después empezaron a ponernos muchos inconvenientes y, al final, quedó todo sin concretar, a medio gas», indicaron los percebeiros. Explicaron que intentarán retomar las gestiones con la actual alcaldesa, «aunque no sabemos si dará tiempo ya a organizar todo para este año», puntualizaron.