Emalcsa detecta un vertido de hidrocarburos en el Mero y paraliza nueve horas la potabilizadora de A Telva, en Cambre

D. Vázquez CAMBRE

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

La empresa indica que la incidencia quedó resuelta el miércoles y que el agua que llega a los hogares cumple todos los parámetros de sanidad

24 feb 2022 . Actualizado a las 20:45 h.

 Varios vecinos de Culleredo denunciaron, la mañana de este jueves, olor a combustible en el agua. «Tiene un olor y sabor raro el agua, como a gasoil», comentó un vecino de Vilaboa. «Aquí en O Burgo también huele a combustible... como a gas», explicaba un residente de este núcleo a Radio Voz. La Empresa Municipal de Augas de A Coruña, Emalcsa, informó al mediodía de este jueves que el miércoles detectó un vertido de hidrocarburos en el río Mero y cerró la planta potabilizadora de A Telva, en Cambre, durante nueve horas para evitar que afectase a la red de abastecimiento.

Desde Emalcsa se precisó que la incidencia ya está resuelta y que los trabajos llevados a cabo podrían haber producido episodios de turbidez en el agua.

«A vertedura detectouna o persoal de Emalcsa en torno ás 14.30 horas de onte, 23 de febreiro, nas inmediacións da planta da Telva. De forma inmediata péchanse as instalacións para evitar que a fuga entre no sistema e denúnciase o feito ante o Seprona e Augas de Galicia, que máis tarde confirman unha vertedura duns 15 litros de hidrocarburos río arriba relacionada cun camión», precisó la firma en su comunicado.

Emalcsa procedió a un proceso de vaciado y lavado de la planta para garantizar que los restos de hidrocarburos no llegasen a la red de abastecimiento y se realizaron operaciones en el embalse de Cecebre para aumentar el caudal del río y acelerar el efecto de lavado.

Explica que una vez que los técnicos descartaron la presencia de vertido, comenzó un proceso lento de apertura de la planta, con un nuevo arranque, purgas y comprobaciones continuas tanto en A Telva como en la red de distribución.

Emalcsa precisó que las analíticas realizadas por su laboratorio confirman que el agua que llega a los hogares cumple con los parámetros de calidad establecidos por la legislación y «non supón risco para a saúde».

Sin embargo, puntualizó que debido a las características extremadamente aromáticas de algunos hidrocarburos y su capacidad para perdurar en el aire, era posible que «algunhas persoas poidan detectar un lixeiro olor ao abrir a billa, sen que isto sexa indicativo da súa presenza na auga, que conta con todas as garantías de salubridade».