Una residente del Chuac, premiada por un estudio sobre el gen de Angelina Jolie

R. Domínguez A CORUÑA /LA VOZ

A CORUÑA

Beatriz Alonso de Castro, médica del servicio de Oncologia del Chuac.
Beatriz Alonso de Castro, médica del servicio de Oncologia del Chuac.

Beatriz Alonso, mir de 5.º año en Oncología, analizó la respuesta a la inmunoterapia

22 mar 2023 . Actualizado a las 08:42 h.

Un trabajo sobre la mutación BRCA 2, «un gen muy conocido por todos los oncólogos», explica Beatriz Alonso de Castro (Santiago, 1993), residente de quinto año en Chuac, le ha valido el primer premio del Congreso Europeo de Oncología e Inmunología celebrado en París. «Sí, es el de Angelina Jolie», confirma la doctora del Hospital Universitario A Coruña acerca de una variante que se hizo popular cuando la famosa actriz decidió practicarse una doble mastectomía profiláctica.

Al congreso que ha distinguido su trabajo en póster asistieron investigadores, oncólogos e industria farmacéutica de todo el mundo para analizar el desarrollo de nuevos fármacos. «Mi trabajo consistía en ver el papel del gen como predictor de respuesta a la inmunoterapia no solo en cáncer de mama, en el de pulmón, los ginecológicos… en tumores sólidos», precisa.

Beatriz Alonso de Castro, residente de quinto año de Oncología en el Chuac, ante el póster que le premiaron en el Congreso Europeo de Oncología e Inmunología.
Beatriz Alonso de Castro, residente de quinto año de Oncología en el Chuac, ante el póster que le premiaron en el Congreso Europeo de Oncología e Inmunología. c

Concluyó que «los pacientes que tienen esta mutación tienen más respuesta a la inmunoterapia y hay tendencia, además, a que sea más duradera con respeto al BRCA 1», resume antes de subrayar la importancia de profundizar en este tipo de investigaciones y reseñar el papel de «nuestra jefa, la doctora Rosario Garcia Campelo: ella tiene muy claro que el futuro está en las nuevas terapias y no duda en enviarnos a formarnos con los mejores, y eso repercute en los pacientes de nuestra área».

En su caso, pasó cuatro meses en el Instituto Gustave Roussy de París, el primer centro europeo de lucha contra el cáncer, en el departamento de desarrollo de fármacos y ensayos clínicos en fases precoces dirigido por Santiago Ponce, experto mundial en medicina de precisión e inmunoterapia.

Para el trabajo premiado, analizó pacientes que, precisamente, habían sido tratados en el contexto de ensayos clínicos precoces y tenían la mutación. «Puede ser esperanzador, la inmunoterapia en los últimos años ha supuesto un bum de conocimientos tremendo, se están descubriendo nuevos fármacos que se combinan con otros que ya conocíamos», explica.

«Es uno de los tratamientos más actuales, y tiene mucho futuro», reitera, ya que la comunidad científica no deja de buscar fórmulas para que los tumores «no se escapen a nuestro sistema inmune, que pueda reconocerlos, atacarlos y, en un futuro, eliminarlos y que curemos a los pacientes», resume.

Biomarcadores

En la actualidad «nos encontramos en la búsqueda biomarcadores que nos arrojen información precisa para personalizar más los tratamientos», agrega sobre el entorno en el que investiga con el objetivo de encontrar «más pistas de cómo actuar en un futuro». Está convencida de que «nos puede abrir las puertas de cómo hacerlo» y subraya que la «fantástica» explosión de conocimientos anima su actividad y enfoca su futuro. «Nos queda mucho por conocer, pero esta es una vía prometedora», sintetiza.

Ahora que finaliza su especialidad, la recién premiada planea regresar el año que viene al instituto parisino «a intentar buscar nuevas moléculas que pueden aumentar la calidad de vida y la supervivencia de nuestros pacientes». Se irá en noviembre y espera obtener frutos porque «queremos que los medicamentos lleguen a todo el mundo, pretendemos hacer llegar a los enfermos gallegos tratamientos muy novedosos».

En el Chuac, ya se está trabajando en este terreno y aplaude la inauguración en diciembre pasado de la unidad de ensayos clínicos. «Permite tener acceso en fases tempranas a tratamientos muy innovadores», indica, ya que la investigación busca alternativas para la supervivencia y la mejora de la calidad de vida de los enfermos cuando el resultado de las terapias previas «no es todo lo óptimo que se esperaba».

En ello pondrá su empeño el próximo año en Francia, pero después «mi idea es volver para seguir aportando a nuestra área sanitaria y al servicio de Oncología», recalca la doctora Alonso.