Los usuarios piden un carril VAO, más zonas de carga y descarga y trenes de cercanías

En A Coruña, el tráfico es un tema que desde hace tiempo ha traído quebraderos de cabeza para todos los usuarios de la vía pública. Tal vez sea su forma peninsular, tal vez su densidad de población... El caso es que, a pesar de los avances que ha habido recientemente en materia de movilidad (mayor alcance del carril bici, peatonalización de nuevas vías, creación de más aparcamientos disuasorios...), se siguen elevando voces aquí y allá que ponen el foco en problemas urgentes. Taxistas, transportistas y ciclistas demandan la descongestión del centro urbano, reclaman más frecuencias en el transporte público y más fluidez a través de la creación de carriles VAO (vehículos de alta ocupación), exigen mayor respeto a las zonas de carga y descarga y hacen hincapié en la necesidad de mejorar los accesos al campus universitario.

Ciclistas

«A clave está no transporte público». Álex Voces, de Mobi-liza, cree que en A Coruña hay demasiados coches. Además, afirma, hay que tener en cuenta que es una ciudad peculiar: pequeña, densamente poblada y en forma de península, con muchas dificultades de acceso. «En calquera cidade hai que intentar reducir o tráfico, pero na Coruña moito máis. O coche é un medio de transporte pouco eficiente, é necesario fomentar outro tipo de vehículos e unha das claves para iso está no transporte público. Hai que dobrar a frecuencia para algunhas liñas e repensar os desprazamentos a polígonos industriais ou novos barrios que agora teñen moita máis afluencia», comenta. Isabel y Marila están de acuerdo: «Para ir de Os Castros a Marineda, por ejemplo, hay que coger primero el 14 hasta el cruce con la avenida de Arteixo y desde ahí el 11. Es muy incómodo, está mal planteado».

Álex también pone de manifiesto la necesidad de un tren de cercanías que cubra pequeños desplazamientos interurbanos, para reducir la gran cantidad de tráfico que llega a diario desde O Burgo, Cambre, Betanzos... Y promueve los desplazamientos en bicicleta, VMP (vehículos de movilidad personal) y a pie.

Taxistas

«Es necesario un carril VAO». Antonio Vázquez, presidente de Radiotaxi, está de acuerdo con los pasos que ha dado el gobierno municipal para que la gente se acostumbre a no bajar el coche al centro. «De todas formas, creo que habría que implementar un carril VAO como medida complementaria», afirma. «Así se podría conseguir que ir en el transporte público realmente suponga llegar más rápido a los sitios y de forma más económica. Muchas más personas dejarían el coche en los aparcamientos disuasorios y se descongestionaría el centro».

Desde su punto de vista, el mayor problema es el cruce de la plaza de Ourense. «Desde las ocho de la mañana está imposible. Se concentra todo el tráfico y acaba llegando la cola a Alfonso Molina por un lado, a Primo de Rivera por otro… No sé cómo se puede hacer, pero hay que solventar eso», lamenta. Antonio, también taxista, pide que se bajen los bordillos: «Los únicos que salen beneficiados son los talleres que cambian ruedas, que no dejan de trabajar».

Usuarios de VMP

El problema del campus universitario. Enrique Fernández, de ACOUVMP, ve muy necesario que se reduzca el tráfico motorizado en la ciudad. Cree que debería ser mucho más amigable, tanto para los peatones como para los patinetes y bicicletas. «Hay que arreglar los accesos al campus universitario», explica. «El carril bici que llega hasta allí —el que pasa al lado de Espacio Coruña— es un desastre, parece casi un camino. Lo único que salva el flujo de coches de ser insostenible es que hay transporte público, pero también haría falta reforzarlo mucho, sobre todo en las horas punta. Se puede contabilizar el número de estudiantes que necesitan desplazarse en cada franja horaria y hacer los ajustes correspondientes en las líneas de bus».

Transportistas

«Las zonas de carga y descarga no se respetan». Javier Galastur, de Transcaf, cree que el Concello no es consciente de la cantidad de vehículos que entran en la ciudad cada día para realizar pequeñas entregas. «No paran de reducir carriles para poner aparcamientos de batería y las zonas de carga y descarga no se respetan, o las ocupa un solo camión toda la mañana. A veces es desesperante».

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