Strategic Minerals: «En Penouta están en juego 80 puestos mineros directos y otros tantos indirectos»

La mina de Penouta, en Viana do Bolo (Ourense) está acaparando todas las miradas en los últimos días. ¿El motivo? La paralización cautelar de la explotación de Strategic Minerals decretada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) y que ha puesto en jaque a la comarca, que cuenta con la única explotación de cobalto de Europa. Al coltán, el denominado oro negro para los dispositivos móviles, se le suma el reciente descubrimiento de unos minerales de alto valor para el vehículo eléctrico, extraídos directamente de las profundidades de Penouta. Por eso los trabajadores de la mina se congregaron ayer por la mañana en la plaza de Galicia de A Coruña, frente al edificio del TSXG, para reclamar que se les escuche y se atienda a sus peticiones. Ruido, pancartas y reivindicaciones centraron la concentración pacífica, en otra jornada de huelga del sector, que cierra filas en torno a sus trabajadores. 

«Esperamos que estas manifestaciones sirvan para que las instituciones se den cuenta de que la resolución provisional que dictaron en primera instancia no era la correcta», sentenció Francisco García Polonio, director técnico de la multinacional. «Hay muchas personas esperando un cambio en la sentencia y que dependen de que la mina se reabra», aseguró, señalando que en torno a unas 130 familias se han visto ya afectadas por el cierre provisional de la explotación minera. «Están en juego 80 puestos mineros directos y otros tantos indirectos provenientes de contratas», afirmó García Polonio. «Eso sin contar con otros sectores que nos dan servicio. Hostelería, supermercados...», continuó explayándose el representante y portavoz de Strategic Minerals. «Esta decisión afectaría a unas 400 o 500 personas en toda la comarca, pero tiene repercusiones mucho más grandes», aseguró, apelando a los metales estratégicos que se encuentran en Penouta, y que convertirían a la mina gallega en un yacimiento clave en el escenario internacional, en plena descarbonización de la economía europea. 

Bajo los lemas «Penouta non se pecha» y «Minería é vida» defendieron la importancia que el Proyecto Penouta tiene para el tejido productivo, tanto autonómico como nacional. «La sentencia de cierre definitivo supondría hipotecar el futuro de la montaña ourensana a tres décadas vista, ya que el proyecto tiene una vigencia a 30 años, prorrogables a 75, con lo que eso implica para el desarrollo del medio rural y de la España vaciada», apuntan desde la compañía, que tenía en previsión extraer unos 50 millones de toneladas de este mineral. 

«Todo lo que los ecologistas presentaron no tiene datos ni fundamentos», aseguró García Polonio refiriéndose al escrito del grupo Ecoloxistas en Acción, que ha motivado en última instancia esta decisión judicial. «Nosotros hicimos informes preceptivos antes incluso de iniciar la actividad minera. Está todo en regla», afirmó. «Todo nuestro trabajo va encaminado a hacer una mina verde y sostenible, para integrarse, eventualmente, en la Red Natura 2000», explicó, en referencia al plan de conservación de la biodiversidad, en el que se encuentra el entorno de Pena Trevinca y por el que el colectivo ecologista denunció «un grave impacto» al medio ambiente.

«Hemos presentado alegaciones, pero acataremos lo que decidan los jueces. Mientras tanto, seguiremos con las movilizaciones para hacer visible nuestro caso», concluyó el director técnico de Strategic Minerals, aferrándose a un cambio de parecer de los magistrados.

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