El juicio contra los asesinos del coruñés Diego Bello en Filipinas continuará el día 22

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

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Imagen de archivo de una protesta para pedir justicia por Diego Bello
Imagen de archivo de una protesta para pedir justicia por Diego Bello EDUARDO PEREZ

Los padres del coruñés viajarán a Manila para asistir a la sesión y mantener una reunión con el bufete que lleva el caso

15 nov 2023 . Actualizado a las 17:42 h.

El próximo día 22 se reanudará el juicio en Manila contra los tres policías acusados de asesinar al coruñés Diego Bello. Los padres del joven asesinado acudirán hasta el país filipino para seguir la sesión contra los acusados por su muerte y por haber falsificado pruebas para tratar de justificar su acusación. La sesión estaba prevista para el pasado 30 de octubre, pero se suspendió «por coincidir con las elecciones a los barangays (barrios) y se fijó para esta nueva fecha, «cuando continuará la declaración de la experta en balística».

Los padres de Bello estarán acompañados por el abogado coruñés Guillermo Mosquera, que mantiene contacto permanente con los abogados filipinos en Manila ejercen la representación legal de la familia en el juicio. Durante su estancia en Filipinas, mantendrán una reunión con el bufete filipino para conocer como se encuentra el proceso y asistirán a la vista oral prevista para el día 22, después del cambio realizado en la convocatoria inicialmente prevista para el día anterior.

De acuerdo con la acusación de la Fiscalía, Bello fue abatido por el capitán Vicente Pañuelos y los sargentos Ronel Azarcón y Nido Boy Esmeralda a las puertas de su casa en la isla de Siargao, al sur del archipiélago en enero del año 2020, siendo la versión policial de que los agentes dispararon en defensa propia cuando iban a detenerle acusándolo de tráfico de drogas.

Las investigaciones realizadas por el NBI (National Boreau of Investigation), un organismo dependiente del estado filipino, concluyeron que los policías habían asesinado a sangre fría a Diego Bello y que habían colocado en sus manos una pistola y unas dosis de cocaína, intentando explicar así su actuación como defensa propia.« La trayectoria de los disparos que acabaron con la vida de nuestro querido Diego acusan directamente a los 3 policías acusados judicialmente de su muerte», apunta su familia en un comunicado.