Vecinos de la plaza das Atochas: «Estamos hartos de no poder acceder a nuestros garajes»

Lidia Fernández A CORUÑA/ LA VOZ

A CORUÑA

Marcos Míguez

Propietarios y usuarios de tres aparcamientos privados denuncian que muchos particulares utilizan este callejón para estacionar sus vehículos en una zona exclusiva para residentes, lo que dificulta la entrada y salida en horas puntas

16 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Vecinos y propietarios de tres garajes en la plaza das Atochas, muy cerca de María Pita, se encuentran en pie de guerra por una situación que califican como inaceptable. Tras más de 5 años denunciando las continuas entradas de particulares a la calle de acceso restringido, que solo permite el paso a los dos aparcamientos comunitarios (que rondan las treinta plazas) y a uno de pago, que cuenta con ochenta espacios para estacionar, los afectados reclaman soluciones al gobierno municipal y más vigilancia en la zona para desincentivar a los reincidentes, como ellos mismos los califican, que se meten con sus vehículos para recoger a los niños del colegio CPR La Grande Obra de Atocha.

«¿Ves ese coche que está entrando justo ahora, el azul? Pues su conductora es una de las habituales», confirmaba J.V., uno de los vecinos afectados, que prefiere no dar su nombre por temor a represalias. «Hemos hecho lo posible y lo imposible. Hemos presentado escritos a los registros oficiales, reclamado reuniones con los departamentos del equipo de gobierno correspondiente, hasta nos pusimos en contacto con el propio colegio para que a través de la AMPA avisara a los padres de que no podían estacionar aquí sus vehículos», explica. «Pero todos nuestros esfuerzos han caído en saco roto», se lamenta.

Junto a él se encuentra otro de los afectados, propietario del párking privado, que tampoco ha querido dar su nombre ante la escalada de inseguridad e incivismo que se vive en esta calle de Monte Alto. «Yo no resido aquí pero la situación me afecta igual, porque cuando hay coches mal aparcados, la gente que tiene una plaza alquilada en mi aparcamiento me llama para quejarse», confiesa. «Y no son una ni dos las llamadas. A veces tengo a las ochenta personas increpándome para que ponga fin a esta situación y yo no puedo hacer nada», asegura, remarcando que él también ha intentado todas las vías administrativas. «Tanto oficiales como extraoficiales», manifiesta. «De hecho, he concertado una reunión con la concejalía de Mobilidade en enero para tratar de esclarecer la situación y ponerle una solución definitiva», indica, poco esperanzado.

Problemas de convivencia

El malestar y la frustración es tal que cada vez son más frecuentes las peleas entre propietarios y conductores que omiten la señal de prohibido el paso con la única excepción de acceder a los garajes. «Y no hablemos del estado en que se encuentra esta señal, apenas se lee nada», concuerdan los dos denunciantes. «La gente tira los bolardos para poder pasar», afirman, señalando al pavimento que aún presenta los restos del obstáculo de hierro destinado a impedir el paso a esta vía de los vehículos no autorizados. «El pasado 1 de diciembre se produjo una pelea, lo que no es de extrañar porque llevamos demasiados años aguantando esto y los ánimos están caldeados», aseguran.

Los vecinos de estos garajes afectados no descartan unirse para denunciar, en conjunto, la falta de acción por parte del Concello. «Es cierto que cuando llamamos a la Policía, vienen agentes y multan a los conductores que incumplen las normas», conceden, «pero no podemos estar así todos los días. Porque no es un caso puntual, es una situación recurrente, que se repite a diario», reiteran, planeando cuál será el siguiente paso a seguir para que las autoridades tomen cartas en el asunto.

El Concello conocedor

Fuentes del equipo de gobierno aseguran estar al tanto de la problemática, e indican que es habitual que se desplace hasta el lugar un policía local en horario de entrada y salida del colegio para regular el tráfico y «velar también porque no se bloqueen garajes ni accesos que dificulten la circulación», manifiestan.