La basura sigue llenando las calles de A Coruña: en siete zonas la recogida no superó el 25 %

A Coruña amaneció este lunes sin contenedores quemados por primera vez en varias noches, pero con la basura rebosando gran parte de las calles de la ciudad. Dentro de la huelga intermitente e indefinida del servicio de recogida de basura convocada por el Sindicato de Trabajadores de la Limpieza (STL), cuyos cabecillas están siendo investigados por una presunta trama corrupta, este lunes estaba prevista la primera de las dos nuevas jornadas de paro. Sin embargo, y aunque de manera desigual, los camiones salieron y parte de la basura se recogió. 

En siete de las trece zonas de la ciudad el porcentaje de recogida no superó el 25 %. Así, mientras en Elviña apenas se recogió el 10 %, en la Ciudad Vieja, Pescadería/Centro, Rosales/Labañou, Sagrada Familia y O Castrillón la cifra fue del 20 %, y del 25 % en Monte Alto. Fuentes municipales señalan que «el rendimiento fue similar al del resto de días», lo que indicaría que «ninguno de los trabajadores hizo huelga».

Los mayores porcentajes de recogida se registraron en algunas de las zonas más castigadas de los últimos días, como Os Mallos, donde se alcanzó el 90 %. En distritos del extrarradio como Feáns, Mesoiro o Valaire el porcentaje llegó al 70 % —el mismo dato que en los aledaños del estadio de Riazor—, mientras que en Os Castros fue del 65 %, en O Ventorrillo/Agra do Orzán del 50 % y en Maogrande/Eirís del 40 %.

La alcaldesa de la ciudad, Inés Rey, calificó de «notablemente escasos» los porcentajes de recogida de basura durante la madrugada del domingo al lunes y aseguró que desde el Concello se están estudiando todas las posibilidades y medidas que están a su alcance para tratar de poner fin al conflicto. En este sentido, una vez más volvió a afirmar que no aceptarán «ningún tipo de chantaje» y aseguró que serán exigentes en el cumplimiento de unos servicios que «afectan a algo tan importante como es la salubridad» de la ciudad. 

Rey aprovechó la intervención para pedir disculpas a los ciudadanos, pero advirtió que «no se puede tomar como rehenes a todos los vecinos». A pesar de que hay una huelga convocada, recordó que exigirán el cumplimiento «estricto» de los servicios mínimos que se han establecido y que impondrán las penalidades que sean necesarias a la empresa concesionaria para que cumpla con los pliegos establecidos en el contrato. «Me consta que la empresa está sancionando a los trabajadores que no están rindiendo o cumpliendo con esos servicios mínimos durante las jornadas que no hay huelga», concluyó.

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