Cruce de ultimátums entre el Ayuntamiento de A Coruña y el STL a menos de dos días de la «emergencia sanitaria»
A CORUÑA
Inés Rey exige que se «termine la violencia» y el sindicato se desvincula de los actos vandálicos vinculados a la crisis de la basura. La noche del viernes se saldó con 25 incendios urbanos
20 jul 2024 . Actualizado a las 17:28 h.El ultimátum del Ayuntamiento, el viernes, de dar 72 horas a Prezero para retirar los residuos acumulados en la ciudad, y así evitar la emergencia sanitaria, ha elevado la tensión en el conflicto de la basura. El tiempo de cesiones se ha terminado y los bandos enfrentados buscan soluciones. La alcaldesa, Inés Rey, reiteró ayer que no va a «ceder al chantaje». Y horas después el sindicato STL le reclamó que «actúe de forma inmediata» sin «vulnerar un derecho fundamental como es el derecho a la huelga».
Ni la cuenta atrás impuesta por el gobierno local ni la manifestación de los vecinos el viernes en María Pita para pedir una solución inmediata lograron disminuir los actos vandálicos, que se cebaron sobre todo con el barrio de Monte Alto, donde se produjeron la mayoría de los incendios urbanos la noche del viernes.
Rey, que participó este sábado en un acto de presentación del proyecto que asume A Coruña como sede del Mundial 2030, aprovechó para condenar, de nuevo, «los actos de violencia que se han vivido en la última noche». Añadió que se está poniendo en «grave riesgo la seguridad de los vecinos», mencionando que se están «calcinando vehículos de gente trabajadora, que necesita ese vehículo para ir a trabajar».
«Yo me pregunto si estos señores que queman estos contenedores piensan también en el trabajador que esta mañana se ha levantado para ir a su puesto de trabajo y se ha encontrado con su coche calcinado. ¿Quién va a resarcir esos daños que le están haciendo a la ciudadanía y a la urbe? Exijo que termine la violencia, porque mientras haya violencia no es posible llegar a ningún tipo de acuerdo con nada», añadió la regidora.
Sobre la aplicación de la emergencia sanitaria, afirmó que se mantiene la hoja de ruta: «Si no se cumple íntegramente el requerimiento que se le ha hecho a la empresa en el plazo estipulado y se devuelve a la ciudad a un estado de normalidad, entrará en vigor ese decreto de emergencia sanitaria. Seguiremos actuando con todas las medidas que tenemos en nuestra mano, con la vigilancia policial correspondiente y, sobre todo, y reitero, sin ningún tipo de cesión al chantaje al que se está sometiendo a esta ciudad».
Solo un par de horas después de las declaraciones de Rey sobre el conflicto, el STL respondió a través de un comunicado firmado por Alfonso Seijo López, portavoz del comité de huelga de Prezero y del sindicato. «La alcaldesa tiene que hablar menos y actuar más. Lleva desde hace tres semanas diciendo que va a tomar medidas», apunta. Además, añade que ellos, «como trabajadores y ciudadanos de A Coruña» también quieren que desde el gobierno local se intervenga «de forma urgente y extraordinaria».
El portavoz del STL también añade en el texto que, en cualquier caso, la regidora debe evitar «vulnerar un derecho fundamental como es el de la huelga, por el mero hecho de aducir o argumentar que es un servicio esencial para la comunidad».
Desde el comité de huelga de Prezero también subrayan que con el paro, «cualquier trabajador de esta empresa, compañero nuestro de forma asamblearia en todo momento está decidiendo y expresando lo que quiere hacer y siempre en defensa de los derechos e intereses tanto suyos como los colectivos». Así, indican que «lo que tiene que hacer la alcaldesa del PSOE, que tiene lo mismo de obrero que nosotros de andaluces, es hablar con los empleados».
«No tenemos nada que ver»
En relación a la cascada de contenedores quemados durante las últimas semanas, desde el STL indican que les parece «rarísimo que no se haya pillado a nadie quemando contenedores». Además, añaden que «van una barbaridad de colectores quemados, cuando evidentemente esta parte ya se desvinculó; no tenemos nada que ver dado que nos perjudica muy profundamente». Este apartado hace referencia a los cuatro identificados vinculados a los siniestros ocurridos la noche del jueves, cuando se quemó mobiliario urbano en diferentes puntos de la ciudad.
Varios simultáneos en Monte Alto
Uno de los barrios en los que no han podido pegar ojo ha sido Monte Alto. Varias de sus calles se han visto afectadas ya entrada la madrugada. El primer aviso en esta zona fue a las 2.09 horas en la calle Tren. Tres contenedores, diversos enseres, como un colchón, y basura acumulada alrededor de los colectores fueron calcinados por el fuego. «Las llamas incluso alcanzaron la fachada de un edificio, marcándola ligeramente por el calor. Un coche sufrió daños en la tulipa trasera. Se realiza la extinción con agua y espuma, y se ventila el cañón de la escalera debido al humo», detallaron los efectivos actuantes. «En las inmediaciones a nuestros vehículos se encuentra otro colchón apoyado en otros contenedores con indicios de haber intentado plantado fuego y no haberlo conseguido por las marcas dejadas», añadieron los bomberos.
A las 5.47 horas el rastro criminal llegaba a la calle Ángel Rebollo. Aquí ardieron dos colectores, uno de ellos subterráneo de papel. Minutos después, a las 5.54 horas, se daba aviso en la calle Doctor Ferrant. En este caso fueron tres contenedores en distintas partes de la calle. Una de las vecinas del primer piso de un inmueble afectado relataba este sábado que se despertó viendo cómo las llamas sobrepasaban la altura de su ventana. También llevaron un buen susto en la calle Cervantes. Aquí el fuego se originó sobre las 6.00 horas y afectó a dos colectores y un turismo. El dueño del coche calcinado por la parte delantera lamentaba este sábado que justo lo acababa de aparcar al volver de trabajar y que vivía en una calle próxima al suceso. «Los residentes me contaron que lo intentaron apagar con mangueras, cubos y extintores. Pero no fue posible. Lo tengo asegurado a terceros y no sé si me lo va a cubrir», sostenía el afectado. También participó el vecino del bajo afectado por las llamas. «Justo la ventana de mi habitación es la que da a los contenedores. Tuve que sacar una manguera por ahí para evitar que el incendio fuera a más. Hay un conducto de gas también cerca y temíamos que ocurriese una desgracia», precisó.
Estos solo fueron algunos de los puntos marcados una noche más por el vandalismo vinculado al conflicto de la basura. De hecho, este viernes se identificaron a cuatro empleados de la empresa concesionaria que estaban junto a los fuegos. Según fuentes policiales, por los incidentes de este sábado aún no hay identificados ni detenidos. La Policía Nacional señala que están investigando todos los hechos denunciados. Los bomberos, por su parte, indican que también actuaron por hechos similares en la ronda de Outeiro, calle Federico Tapia, Marqués de Figueroa, avenida de Monelos —aquí también resultó afectado un vehículo— y calle Tornos.