El triple de una ciudad disfrutona

Javier Becerra
Javier Becerra CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

A Coruña es, definitivamente, la gran ciudad del ocio del noroeste peninsular

04 oct 2024 . Actualizado a las 19:41 h.

Definitivamente, A Coruña es la gran ciudad del ocio del noroeste peninsular. El estallido que generó el triple que anotó Yunio Barrueta en el Coliseum en el Leyma Coruña-Real Madrid, abriendo la puerta de la victoria final, lo ha simbolizado una vez más. No por la euforia, que seguramente se daría en cualquier otra urbe en la que su equipo hiciera una gesta similar (ni más ni menos que ganar al campeón de Liga en tu primer partido como ascendido de un modo épico), sino por todo lo que se generó antes y que explotó cuando el balón entró en el aro tras rebotar en el tablero.

Había dudas sobre la afición al baloncesto en la ciudad, un deporte normalmente eclipsado por el fútbol. Pero el año pasado, con una serie de partidos con finales de infarto y la perspectiva del ascenso, se empezó a generar un movimiento naranja muy especial que convirtió el Palacio de los Deportes en una fiesta. Y cuando hay fiesta, esta urbe acude en masa. Siempre ha sido así, pero en los últimos años todo se ha disparado. Por ello, se han multiplicado los espectáculos y atractivos donde volcar ese espíritu hedonista. El domingo pasado en el Coliseum se vivió eso: 9.300 personas dejaron boquiabiertos a pesimistas y optimistas. Porque nadie podía imaginar algo así en verano, cuando el equipo no llegaba a los 1.500 socios (ahora son 7.600, el tope). Sin embargo, todo responde a la lógica del gozo. Del mismo modo que no es posible cenar el fin de semana sin reserva, que los festivales musicales se suceden con llenos, que el humor abarrota teatros y que el Dépor tiene una lista de espera de miles, el Leyma Coruña se erige ya como otro estandarte de esta ciudad disfrutona. Esa en la que la gente no soporta estar en casa. La que tiene un dinamismo que desborda lo previsible y atrae cada vez a más gente de fuera, enamorada de lo que pasa aquí. Ahora también lo sabe la Liga ACB.