Lectura gratis en la librería Lume de A Coruña

Alfonso Andrade Lago
Alfonso Andrade CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

Libreria Lume.
Libreria Lume. César Quian

12 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando octubre empezaba a descolgar por los edificios sus largas sombras otoñales, cuando ciclogénesis dramáticas y explosivas —entonces temporales o tormentas— anegaban la plaza y diluían cualquier opción de clavar el che en la tierra o batirse en duelos de canicas, los chavales de Maestro Mateo nos refugiábamos en la librería Lume, que acababa de aterrizar en el barrio. Sus estanterías de estreno, el olor a papel, la iluminación... Todo era nuevo y seductor. Pero para nosotros lo mejor era que funcionaba como una biblioteca.

Al fondo, creo recordar que entre el suelo y un par de sillas bajas, nos arrellanábamos los compañeros de la Academia Galicia con algún cómic de Astérix y Obélix y nos adentrábamos en las profundidades de la Galia.

Aunque recuerdo que siempre me sorprendió, yo no era consciente realmente del valor que tenía que aquellos libreros que nos dejaban hacer, con el silencio como única contraprestación y con la noble intención de que leyésemos, pusiesen todos sus tesoros en manos de unos mocosos de diez años que, incluso sin querer, podían estropearlos en cualquier momento. Pero así fueron cayendo, una por una, aquellas maravillosas historietas de Uderzo, Goscinny y sus irreductibles galos.

Con el paso de los octubres y de sus sombras descolgadas vas destilando la relevancia de todo aquello, la influencia que un librero inteligente puede ejercer sobre un niño. Siento en el alma el cierre de Lume. Por si sirve de algo, he de decir que, por ellos en gran medida, muchos de aquellos chavales somos hoy lectores empedernidos. También mis hijos, que tienen desde pequeños la colección de Astérix y Obélix. Supongo que esa era la intención, así que ¡muchas gracias!